El PP hará al gobierno local de A Coruña un marcaje en espejo, y el BNG, según comisiones

David García A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

César Quian

Los populares repiten el modelo que plantearon en los últimos mandatos

07 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La corporación afronta cuatro años en los que regresará a una configuración con solo tres partidosPSOE, PP y BNG— dejando atrás los cinco que llegó a haber en el último mandato, un período que concluyó con cuatro grupos políticos y tres concejalas no adscritas en María Pita. La decisión de los socialistas de gobernar en solitario deja a populares y nacionalistas como representantes de la oposición y por ello con la labor de vigilar la acción de gobierno.

Para llevar a cabo esta tarea de monitorización y control del gobierno municipal apuestan por dos modelos diferentes, propiciados principalmente por el distinto número de concejales con los que contará cada uno. El Partido Popular tendrá 12 ediles, uno más que el propio gobierno local, mientras que en el BNG serán cuatro, un número bastante inferior aunque el doble de los que tuvo en el pasado mandato.

Los populares aprovecharán su amplia representación para organizarse como un espejo del gobierno local de manera que cada uno de sus concejales se encargue de un área de gobierno, aunque la estructura no está todavía definida por completo y quedan cuestiones por concretar.

Este modelo ya fue el elegido por los populares durante los últimos cuatro años, en los que contaron con el mismo número de concejales que el gobierno local. A la espera de que la organización se defina por completo, hay algunas cuestiones seguras. Así, Miguel Lorenzo se encargará de controlar la acción de la alcaldesa, Inés Rey, que será responsable de los barrios y de las relaciones con la Administración. Mientras, Roberto Rodríguez, número 2 del PP, será el encargado de controlar el área de gobierno que dirigirá José Manuel Lage y que incluye Economía, Hacienda y Planificación Urbana.

 

Caras conocidas y otras nuevas

Los otros concejales populares que repiten también seguirán con la labor que desempeñaron en los últimos cuatro años y Roberto García, Antonio Deus y Roberto Coira se encargarán de Deportes, Urbanismo y Cultura, respectivamente. Además, podrían sumar otras áreas a la espera de conocer cómo se estructuran los populares.

Entre las caras nuevas del PP en la corporación también hay casos en los que ya está perfilado de qué áreas se encargarán. Esto ocurre con Carmen No, que llevará Comercio, Carlos San Claudio, que abarcará las cuestiones vinculadas a Juventud, y José Ramón Amado, quien entró tras las renuncias de Mar Ferreiro y Nazareth Cendán y cubrirá Medio Ambiente, un área con gran repercusión por incluir la limpieza ciudadana y el tratamiento de residuos, además de la planta de Nostián.

El BNG apuesta por una configuración diferente por su menor número, aunque en cierta manera también está pensada para cubrir las áreas municipales. Los nacionalistas toman como referencia las comisiones existentes, ocho informativas y cuatro especiales.

El portavoz de la formación, Francisco Jorquera, será el titular en cinco de ellas: Economía, Hacienda, Planificación Urbana y Administración General; Portavoces; Transparencia; Fachada Marítima; y Área Metropolitana. En todas ellas, salvo en Transparencia, tendrá a Avia Veira como suplente, puesto que queda para David Soto —que también lo será en la primera de ellas—. Además, el propio Jorquera tendrá este segundo puesto en la de Fomento y Promoción de la Ciudad, cuya titularidad recaerá en Mercedes Queixas.

La número 3 del BNG también liderará la de Bibliotecas y la de Honores y Distinciones, mientras que Avia Veira será titular en las de Movilidad y Agenda Urbana. Por último, David Soto será el número 1 en la comisión de Bienestar Social y en la de Sugerencias y Reclamaciones, en las que tendrá a Queixas y Veira, respectivamente, como suplentes.

El hecho de haber doblado su número de ediles en la corporación permitirá al BNG realizar un control más minucioso de la gestión municipal del Partido Socialista, a lo que tendrá que sumar la vigilancia del cumplimiento de los puntos incluidos en el pacto de investidura que permitió que Inés Rey vuelva a ser alcaldesa.

Este acuerdo incluye la obligatoriedad de realizar reuniones cuatrimestrales para analizar el grado de ejecución de los puntos del pacto, que se organizan por áreas y según la urgencia con la que se tengan que llevar a cabo.

La entrega de un borrador del presupuesto cada mes de septiembre, una investigación sobre la implicación de las empresas en el caso STL y la creación de un consorcio para la fachada marítima son algunas de las cuestiones incluidas, a las que se suman otras que abarcan casi todas las áreas de gobierno.