El grafitero Coas sale de prisión

Alberto Mahía A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

Alberto Mahía

La jueza lo dejó libre a espera de juicio tras el pago de una fianza de 10.000 euros

24 jun 2019 . Actualizado a las 02:30 h.

Tres semanas después de ingresar en la prisión de Teixeiro por un delito continuado de daños y tenencia ilícita de armas, el grafitero Coas, el que más pintadas ha hecho en la ciudad, ya está en la calle. Su familia reunió en una semana los 10.000 euros que se le impusieron de fianza. 

Este joven de 24 años fue una pesadilla para las autoridades municipales. La Concejalía de Medio Ambiente intentó frenarlo varias veces. Se le ofrecieron muros en los que pintar libremente y trabajos en beneficio de la comunidad a cambio de no pagar las sanciones que llevaba acumuladas por pintadas en el mobiliario público. Nada se logró. Ante su obcecación, el Ayuntamiento acudió a la Fiscalía a principios de mayo para que abriesen diligencias contra él por un posible delito continuado de daños. Se le atribuyen más de 500 pintadas en la ciudad. Un mes después, fue detenido en una operación a nivel nacional, junto con otros 7 grafiteros, por destrozos en trenes en el norte de España.

A Coas se le atribuyen 70 delitos de daños por un valor de 215.640 euros. Además, durante el registro en su domicilio, se le intervinieron armas de fuego, una placa de policía simulada, grilletes y munición, entre otros efectos, por lo que se ha decretado su ingreso en prisión.

Ahora, de nuevo en la calle, tendrá que acudir los días 1 y 15 de cada mes al juzgado. Se le retiró el pasaporte y ha de estar localizable. El fiscal delegado de Medio Ambiente, Álvaro García Ortiz, explicó que este tipo de actos vandálicos en lugares con un patrimonio cultural «pueden ser castigados con una pena de prisión de entre 6 meses y tres años, o multas de 12 a 24 meses. El resto de pintadas realizadas en lugares sin estar catalogados podrían, en cambio, considerarse como delito de daños sobre la vía pública y delito continuado de daños». No lleva pena de prisión a menos que se niegue a pagar la multa o realizar trabajos en beneficio de la comunidad.