La conquista del Oeste

J. Pablo Abeal PROFESOR DE LA UDC

A CORUÑA

ANGEL MANSO

La metrópoli lleva décadas en el mismo punto, mientras hay un gran dinamismo en los municipios del entorno

09 ene 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Me surgen muchas imágenes para abordar este tema. Pero de todas ellas, me quedo con las carretas volando por las llanuras en la conquista del Oeste. Un vertiginoso torrente de emociones. Hombres, mujeres y niños llenos de esperanza intentando forjar su hogar en un territorio peligroso y desconocido, pero repleto de oportunidades.

Desde que tengo uso de razón se lleva hablando del problema demográfico en Galicia. Las teorías son muchas y la polarización de opiniones también. Sin embargo, el tiempo ha pasado y parece que no ha llegado el apocalipsis. Todavía. No obstante, dentro del club de capitales de provincia que aspiran a ser referentes territoriales como Málaga, Zaragoza o Murcia, la ciudad de A Coruña ha perdido fuelle.

La metrópoli lleva décadas en el mismo punto. Su reducida extensión y la falta de voluntad política para reformular el tamaño de planta municipal a nivel nacional son factores que no ayudan. Del conjunto de municipios de su área de influencia, se observa cierto dinamismo en algunos de ellos, como por ejemplo Arteixo, Culleredo, Oleiros o Sada. Los flujos migratorios centrífugos sí que podrían representar un factor relevante en este caso. Una reasignación de habitantes promovida por una competitividad entre áreas locales que puede llegar a convertirse en un juego de suma cero.

Las claves para que un municipio se convierta en un polo de atracción se basan en un liderazgo fuerte. Algunas acciones para lograrlo serían, por ejemplo la inversión en infraestructuras diseñadas para atraer población joven con talento; definir una identidad indeleble e involucrar a sus habitantes en la toma de decisiones que les afecten directamente; promover la cooperación pública y privada para atraer inversores; o favorecer un fácil acceso a la vivienda fomentando la puesta en el mercado del mayor stock de vivienda posible.

La relación entre el crecimiento demográfico y el económico no es tan evidente como pudiera parecer inicialmente. Quizá la visión de la conquista del Oeste no sea tan descabellada. Los individuos asumen riesgos importantes a cambio de expectativas elevadas. El futuro no llegará mañana mismo, pero con la actual situación demográfica, donde el factor fertilidad y mortalidad son difícilmente influenciables, parece que se apuesta todo a un crecimiento muy elevado de la productividad. ¿Os parece razonable?