Dos meses doblando turnos entre dos hospitales

T. S. A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

CESAR QUIAN

08 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Mientras la mitad de los españoles inicia las vacaciones el 1 de julio, esa fecha, hace justo una semana, Carolina multiplicó por dos su volumen de trabajo. Esa jornada empezó a las 8 de la mañana en el Chuac, de donde salió a las 15.00 horas. Y a las diez de la noche inició un nuevo turno en el HM Belén. Sí, Carolina es enfermera, y este verano no se va a aburrir.

Como la gran mayoría de profesionales de su gremio, se ha pasado meses en el dique seco. «Y ahora viene todo junto», dice. En mayo le llamaron de la maternidad privada para ofrecerle un contrato hasta octubre cubriendo las vacaciones de todas las enfermeras. «Y hace una semana me llamaron del Chuac para incorporarme dos meses en cirugía plástica».

No ha declinado el segundo trabajo porque hacerlo tiene consecuencias muy negativas. «Me iría al final de las listas, y a mí me gustaría trabajar en la sanidad pública». En situaciones así más vale tener buena sintonía con las compañeras porque son ellas las que le van a hacer más fácil este galimatías de horarios. Toca siempre pedir cambio de turnos y también que la esperen hasta que llegue con la lengua fuera. «Si salgo de un hospital a la misma hora en que entro en el otro, pues eso, tardo un poco...», explica Carolina, quien ya hizo alguna sustitución el año pasado al acabar la carrera. Hará un esfuerzo titánico este verano, «como hacen muchas», para así algún día poder asirse a un trabajo, uno, solo uno y estable como enfermera.