García destaca que «un estudio avalado por el CSIC refleja que las comunidades de fitoplancton de la ría de Vigo tienen una enorme diversidad. Una gota de su agua tiene un número tan elevado de micoorganismos fotosintéticos que provocan una alta calidad de su fitoplacton».
Según el experto «el Atlántico es el que más vida por metro cúbico tiene; y una cadena alimentaria de gran valor nutritivo que va desde el fitoplancton, algas, crustáceos o pescado. El valor nutricional de las algas gallegas nos ayuda a fortalecer nuestro sistema inmunológico, defendiéndonos de agentes agresores. Su potencial es enorme».