Una científica que arrasa como monologuista

CIENCIA

Alba Tarrío, bióloga coruñesa de 26 años, se clasificó para al final nacional de monólogos científicos «FameLab» tras imponerse en la semifinal celebrada en Barcelona y que presentó Luis Piedrahíta.
Alba Tarrío, bióloga coruñesa de 26 años, se clasificó para al final nacional de monólogos científicos «FameLab» tras imponerse en la semifinal celebrada en Barcelona y que presentó Luis Piedrahíta.

La bióloga coruñesa Alba Aguión Tarrío se ha clasificado para la final nacional del concurso FameLab

14 abr 2016 . Actualizado a las 12:20 h.

El de la izquierda es un coruñés de la avenida de Arteijo considerado uno de los mejores monologuistas del país. La de la derecha es de Monte Alto, trabaja como científica en Inglaterra, y es finalista nacional de un concurso de monólogos científicos que se celebrará en Madrid el 12 de mayo. Ambos coincidieron en Barcelona en la semifinal de este certamen. Luis Piedrahíta fue el presentador de la gala y Alba Aguión Tarrío, de 26 años, la vencedora con un monólogo sobre la fábula de la hormiga y la cigarra en la que con humor defiende el papel de la segunda.

«Para la final tengo que preparar otro texto, que solo puedo avanzar que irá de hormigas. Me presenté al concurso con la idea de compartir mi fascinación por los insectos», destaca esta bióloga que trabaja como coordinadora de eventos sobre el Ártico y la Antártida en una empresa fundada por el explorador polar Antony Jinman y antes, entre otros proyectos, trabajó cinco meses sobre el tema de las hormigas invasoras. FameLab, que es como se llama el concurso internacional, intenta acercar la ciencia a la gente de una manera divertida. Nació en el 2005 gracias a una idea del Festival de Ciencia de Cheltenham. En poco más de una década se ha convertido en una referencia y, para que se hagan una idea, ya se anuncia que pronto se pondrán a la venta las entradas para la final de Madrid, en la que habrá ocho candidatos a representar a España en la prueba internacional, entre ellos Alba, exalumna del Zalaeta y beneficiaria en su día de una de las becas USA que concedía el Ayuntamiento. Una coruñesa de ciencia y humor.

Con los ojos cerrados

Un buen día, Marita Martín Carmona, hija del que fue legendario jugador del Deportivo Cheché Martín, decidió hacer un retrato de su madre. «Me estaba costando mucho trabajo hasta que la capté con los ojos cerrados y me llamó la atención cómo conecté con ella. Con los ojos cerrados vas a otro sitio, hacia dentro. La musculatura se relaja...», reflexiona Marita, que ayer inauguró su primera exposición en la sala de muestras del palacio municipal de María Pita bajo el título genérico de Luz en los párpados. Marita Carmona, que es como firma las obras, presenta 17 cuadros en los que se ven personas de todas las edades, desde bebés a mayores, con el nexo común de que sus ojos permanecen cerrados. Hasta el 29 de mayo Marita nos invita a abrir muy bien los ojos para ver el resultado de su último año y medio de trabajo.

Despedida hospitalaria

Desde el 7 de septiembre se formaban en el Chuac. Son 82 alumnos de sexto de Medicina que durante estos meses realizaron sus estudios en el propio complejo hospitalario. Como llegó el momento de decir «hasta pronto» a esta promoción organizaron un acto despedida. En el mismo intervinieron Francisco José Vilanova Fraga, gerente de la Xerencia de Xestión Integrada de A Coruña; Antón Fernández, presidente de la comisión de docencia, y Juan Carlos Vázquez Barro, coordinador de este casi centenar de estudiantes que sueñan con regresar pronto a trabajar al hospital en el que recibieron parte de su formación.