Esos cambios en la calificación de suelos, que provocan incluso que haya viviendas que de repente se encuentran fuera de ordenación, es lo que lleva al BNG a hablar de la «indefensión sobrevida» en la que se encuentran todas aquellas personas cuyas propiedades no estaban afectadas en el documento que se aprobó inicialmente, pero que ahora ven como lo que eran sus solares han dejado de ser edificables y, por consiguiente, han perdido valor.
«Falamos de valor emocional, porque a moita xente se lle van romper os plans, e falamos tamén dunha perda económica moi importante, que tirando moi polo baixo andará arredor dos dez millóns de euros. Isto é un roubo, un espolio, a través dun engano», dice Xoán Castaño, que insiste en la necesidad de abrir un nuevo período de exposición pública, de realizar charlas informativas y de crear algún servicio de apoyo a la vecindad para que pueda entender cómo le van a afectar los cambios en el planeamiento.