En el momento en que empresa y comité retomen las negociaciones sobre el segundo ERE, el próximo viernes, los trabajadores de Lantero se internarán ya en su tercer mes de huelga. Sorprende, entre ellos, que la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) haya esperado hasta ahora para hacer público un comunicado que, bajo la apariencia de una llamada al diálogo, encierra en su opinión una inequívoca toma de posición a favor de la dirección del grupo cartonero y una acusación que consideran «intolerable». La patronal responsable a la plantilla de la ruptura de las conversaciones, cuestión que ayer fue respondida por los representantes de los empleados movilizados: «Estos señores deberían hacer memoria, o preguntar si desconocen qué está sucediendo, y comprobar que somos nosotros quienes insistimos, desde el 20 de noviembre, en la necesidad de negociar, 24 horas al día si hace falta, para alcanzar un acuerdo que ponga fin de una vez a este conflicto».
López replica que es el staff el que bloquea una solución al exigir la suspensión de la huelga, que la plantilla «no puede aceptar, tras un sacrificio de dos meses, sin garantías de que la dirección renuncie al ERE para dialogar». Es más, ya que la confederación considera que las medidas adoptadas por Lantero son correctas, el comité se pregunta «si se está refiriendo a cuestiones como llenar la fábrica de perros de presa y guardias armados».