Unas 100 personas acudieron al acto convocado en Viveiro por una gestora ciudadana que aspira a impulsar cambios legislativos que pongan fin a las okupaciones
30 nov 2025 . Actualizado a las 22:47 h.Alrededor de cien personas acudieron este domingo en el Teatro Pastor Díaz de Viveiro a la convocatoria de la gestora ciudadana que aspira, entre otros, a impulsar cambios legislativos para poner fin a las okupaciones de viviendas. Un fenómeno que en A Mariña se está dando en ocasiones contadas (se tiene conocimiento de una casa okupada en la parroquia de Lago, Xove; y algunos casos, por ejemplo en Burela o Viveiro, de inquiokupas, inquilinos que dejan de pagar el alquiler y se niegan a abandonar el inmueble), pero que está generando una importante alarma en municipios como Xove, donde existe un buen número de viviendas deshabitadas en buenas condiciones, y mucha población mayor.
Al escenario del teatro subieron Marco Antonio Insua, vecino de Burela, y María José Fraga, vecina de Xove que creo el grupo de wasap «Contra okupas da Mariña», que ayer contaba con 930 miembros, aunque un porcentaje importante de ellos no participa en sus chats. Los dos hicieron un llamamiento a la unidad y a la participación contra la okupación. «É unha inxustiza que non podemos seguir normalizando. Cando alguén violenta unha casa, non só violenta a casa, senón que quita as raíces, quita os recordos», afirmó Insua. Fraga también hizo referencia a la lentitud de la burocracia y de los procedimientos judiciales para los desalojos. Cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado «teñen as mans atadas», indicaron. «Queremos que os tempos xudiciais sexan compatibles coa vida real das persoas», avanzaron.
«Cando se okupa unha casa falamos de historia, de sacrificio, de memoria, non só de cemento e de pedras», Marco Antonio Insua, portavoz de la gestora ciudadana
El objetivo de la gestora, indicaron, es celebrar encuentros similares en otros municipios de la comarca mariñana para continuar «sensibilizando á xente e xerando conciencia». Constituirse en asociación sin ánimo de lucro y acabar entrando en contacto con colectivos similares de otros puntos de España sería el siguiente paso. Sin embargo, el encuentro convocado «contra la okupación» acabó derivando en batiburrillo en el que se mezclaron temas como la inmigración (regular e irregular), las ayudas a personas que se encuentran en una situación de vulnerabilidad, o no, la política, etc... y que se alejó del foco principal del foro.