Isabel Díaz Ayuso se da un baño de masas en Ribadeo, recibida con aplausos y piropos: «¡Guapa!»

J.A. RIBADEO / LA VOZ

A MARIÑA

Pepa Losada

El salón de actos del hotel Voar, como se preveía, quedó pequeño en la última conferencia de los Foros de Debate

14 feb 2025 . Actualizado a las 22:40 h.

La conferencia de este viernes por la tarde en Ribadeo de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, cerrando los Foros de Debate había generado una gran expectación. Y la afluencia de gente respondió con creces a este pronóstico. A las siete de la tarde, hora y media antes del inicio de su conferencia, ya no quedaban sillas libres en el salón A Mariña del Hotel Voar y la gente comenzaba a ocupar, de pie, el resto del local. Ya lo había advertido el presidente de Sargadelos y propietario del Voar, Segismundo García: una norma no escrita de los Foros de Debate, que se cumple a rajatabla, es que no se reserva ninguna plaza, la gente va situándose según va entrando y eso se evidenció una vez más este viernes, cuando diferentes cargos políticos vieron cómo quedaban sin sitio, teniendo que conformarse en el mejor de los casos con seguir la conferencia de pie o por streaming en el canal de la Fundación Sargadelos. Sobre las ocho de la tarde, media hora antes del inicio de la conferencia, la gente ya se agolpaba a las puertas del salón Voar sin poder acceder al interior. Afuera la policía local regulaba el tráfico que se concentraba en la rotonda del Voar, sin sitio para aparcar.

Entre el público, como cabía esperar, hubo una numerosa presencia de cargos del Partido Popular llegados de Galicia y Asturias, alcaldes, concejales y también diputados provinciales y nacionales y senadores, como José Manuel Balseiro, o el delegado de la Xunta en Lugo.

A las ocho y media de la tarde Ayuso entró en el Salón A Mariña del Voar, donde ya se había vetado el paso a más público, acompañada del alcalde de Ribadeo, Dani Vega, del diputado nacional del PP Jaime de Olano, y del que iba ejercer de presentador de la conferencia, el periodista Jenaro Castro. El público la recibió de pie, disparando fotos con sus teléfonos, entre aplausos y piropos: «¡Guapa!».

Tras la intervención de Jenaro Castro, las primeras palabras de Isabel Díaz Ayuso fueron para agradecer la invitación de la Fundación Sargadelos y «lamentar que hayan quedado fuera  tantísimas personas por falta de sitio. Estas palabras van por todos ellos y por los que estáis aquí esta noche». Y añadió, entrando ya en materia: «La libertad es el motor de mi vida». 

A continuación desgranó algunos de los argumentos que caracterizan su gestión en la Comunidad de Madrid, como la crítica a la política de subvencionar al que no quiere trabajar: «Los autónomos han de ser solidarios porque algunos políticos que no han creado un puesto de trabajo en su vida tienen que llenar portadas», dijo, desatando aplausos.

«No queremos igualar a la baja ni enfrentar para dividir. Lo que sí defiendo igualar es en oportunidades, no en la pobreza. Quiero que haya gente con más patrimonio y recursos y no compro el discurso del que quiera igualar a la baja», dijo. Y continuó exponiendo su ideario, con frases como «no creo en solucionarlo todo a base de subsidios» o «recaudar es bien sencillo, lo difícil es gobernar» o «creo en la educación en libertad y calidad, que decidan las familias».

Ayuso defendió en Ribadeo la colaboración público privada y el sistema sanitario madrileño. «No se están tomando decisiones valientes para recortar el gasto y reducir la burocracia... no se abordan cuestiones de Estado, como las pensiones: ya vendrán otros a solucionar los problemas», dijo. Y en referencia a Cataluña, añadió: «Nosotros no tenemos embajada, no tiramos el dinero publico».

También entró en temas como la corrupción y mostró su preocupación por el descrédito de los jueces, «cuando se redactan leyes para proteger a familiares de políticos», por la polarización, concluyendo su alegato: «Necesitamos recuperar la libertad, el buen nombre de España».

Así de dio paso al turno de preguntas del publico. Su idea de Estado: «Tenemos un estado autonómico que vertebra a España. La vida es distinta en las regiones, los parlamentos permiten que se traten los temas de cada uno, donde se recoge la pluralidad y contrastes que tiene esta gran nación. Tenemos un estado autonómico que se sustenta en una monarquía parlamentaria, fruto de un gran acuerdo, de nuestra magnífica transición de un país que quería convivir... Nos hemos dado una nación solidaria, admirada en el mundo entero».

En otra cuestión habló del clima político actual: «Creo que hay grandes personas dedicando su tiempo a la política (...) y que hasta hace poco se entendía que a pesar de estar todo el día peleando los partidos, por competencia y porque ves la vida de manera diferente y tú quieres que tus ideas salgan adelante y eso exige una sana disputa, más o menos hemos caminado todos juntos. Pero de unos años a esta parte, desde que tuvimos de presidente a José Luis Rodríguez Zapatero, todo cambio mucho. En España había alternancia política y aglutinabas mayorías para gobernar, pero no aglutinabas mayorías contra otros». Y así se llegó a la situación actual, que describió así, con un gobierno sustentado por un «conglomerado de siete votos que nos llevan siempre al absurdo y a un deterioro institucional terrible. Estamos en trincheras, han creado un muro y gobiernan para una parte del muro contra la otra. Y eso nos lleva a situaciones complicadas, absurdas, dañinas y que tienen difícil reversión».

No se obvió la pandemia. Ayuso defendió su gestión: «A mí en ese momento me importaba informar a los ciudadanos. Defendimos la libertad porque sin libertad no se puede vivir, pero lo conjugamos con rigor científico. Nos informamos bien. Hablamos con los mejores médicos del mundo, supimos que la pandemia iba para dos años y supimos que no se podía cerrar permanentemente.... Si la capital del país hubiese estado cerrada dos años no sé que habría sido del país».

Hubo también una intervención del público cuestionando su gestión de la pandemia. «Su pregunta está trufada de intenciones políticas», comenzó Ayuso su respuesta, desatando la mayor ovación del auditorio, que se repitió cuando acusó al Gobierno de España de su culpabilidad en las víctimas por no atender la recomendación inicial de la OMS de cerrar los aeropuertos.

Y como cierre, un asunto que no podía faltar: «Vamos a tener que pedir perdón al fiscal general del Estado», dijo una persona del público. Ayuso contestó: «Veo que el Gobierno está trabajando para protegerlo, lo que no ocurre en ningún estado democrático del mundo. Lo van victimizando y creo que lo próximo va a ser el indulto. Que lo van a indultar lo veo claro. Todo parece indicar que ha cometido graves delitos, impropios de su cargo y esto significa que cada vez que alguien se enfrenta al Gobierno rompe las reglas del juego y se emplea el poder judicial. ¿En qué país nos convertimos si el poder judicial reside en la Moncloa?».

El tema de este año de los Foros de Debate que organizan el Grupo Voar y la Fundación Sargadelos fue Iniciativa privada y poder público y Ayuso cerró el ciclo de conferencias en el que la precedieron Mario Conde, el exministro José Blanco y el periodista y escritor Juan Luis Cebrián.