Embarrancamiento del «Casón» y sus consecuencias en Alúmina-Aluminio

Juan Andrés Pérez Vila

A MARIÑA

FOTO OLIVER

Tres décadas después, los miembros de aquel comité de empresa siguen formulándose muchas preguntas

09 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El pasado día 5 se cumplieron 30 años del embarrancamiento del Casón y sus posteriores consecuencias con el despido del comité de empresa de Alúmina-Aluminio debido al traslado de unos pocos bidones del Casón a San Ciprián. Llegaron el día 12/12/87 y estuvieron en la fábrica hasta el 15/12/87, cuando salieron para Holanda. El posterior juicio en Lugo sentenció el despido de los 23 miembros del comité de empresa en un juicio rápido de solo seis horas, a pesar de ser un caso bastante complejo.

El juez era hermano de un comercial que facturaba a la fábrica como cualquier suministrador pequeño, pasando posteriormente su facturación a ser más o menos un 400 % más que antes del juicio. En el Supremo hubo un voto particular a favor del comité y no se tuvo en cuenta en el Constitucional porque rechazaron el recurso del comité por defecto de forma que fue presentado por D. Joaquín Ruiz Jiménez.

Treinta años después del embarrancamiento del Casón, los 23 componentes del comité de empresa de Alúmina-Aluminio (algunos ya fallecidos) nos seguimos preguntando: 1) ¿Dónde están los verdaderos culpables de la situación creada en Alúmina-Aluminio debido al translado de algunos bidones del Casón?

2. El día 05/12/87, el Remolcanosa V teniendo remolcado al Casón y estando negociando el remolque que suponía 300 millones de pesetas según lo tenían, cortan las estachas para que el barco embarrancase porque el recuperarlo de ese modo eran 3.000 millones con la mala suerte de que debido a las corrientes, en vez de ir a la playa se les fue para las rocas y después no hubo forma de recuperarlo. ¿No hay culpables de esta maniobra?

3. Hasta el día 12/12/87, que llegan una parte pequeña de los bidones a Alúmina-Aluminio, vemos por televisión todos los días las grandes explosiones que sufre el Casón, los 23 fallecidos de la tripulación incluído el capitán, la salida en estampida de toda la gente de los pueblos limítrofes como Fisterra, Corcubión, Cee, etc.. Además se observan las continuas discrepancias entre todos los responsables políticos tanto autonómicos como a nivel nacional. Cargan casi todos los bidones en el puerto de Carburos en Cee con destino a Holanda y para rematar con la ineficacia de todos los políticos responsables de todo el proceso desde el embarrancamiento del Casón, sale el gobernador civil de Coruña por televisión haciendo un llamamiento a la población de Fisterra, Corcubión y Cee que vuelvan para sus casas que los bidones más peligrosos van en la provincia de Lugo. Nos seguimos preguntando por qué no cargaron todos los bidones en el barco que los llevó a Holanda y terminaban así con el problema. ¿Por qué motivo mandan unos pocos al otro extremo de Galicia hasta Alúmina-Aluminio? ¿Cómo se puede reaccionar ante una situación en la cual los políticos carentes de sentido común hacen el problema más grande?

Nosotros en ese momento, como responsables de 1.500 trabajadores, solo pensamos en su seguridad y no nos dimos cuenta de que los políticos nos estaban metiendo en una encerrona para tapar lo que habían aprobado en 1985 en el consejo de administración de Alúmina-Aluminio con el voto en contra de los representantes de los trabajadores de 10.500 millones de pesetas para reparar el puerto de Dragados lo había entregado el año anterior y costara hacerlo 3.500 millones. Nosotros hicimos un seguimiento a los 10.500 millones que ellos aprobaran en el consejo de administración para reparar el puerto y llegamos a la conclusión de que no se hizo ninguna obra, sino que esa cantidad de dinero fue desviada. A los responsables políticos nunca les pasa nada, nunca tienen responsabilidad, todo lo hacen bien.

Llegada de los bidones

4. Cuando los bidones llegaron a la fábrica el primero que prohíbe que entren en la misma es el director Sr. Moñita y da órdenes a los trabajadores para que atranquen las puertas principales con bolsas de colada de aluminio que pesan varias toneladas cada una (hechos probados en sentencia).

5. Se llegó a un acuerdo de un plan de evacuación entre la dirección de la empresa y el comité para que cuando se cargaran los bidones en el Galerno el personal abandonara la fábrica. Pero una vez que empieza el movimiento de los bidones para empezar la carga y cuando el personal ya tiene abandonados sus puestos de trabajo, la empresa rompe el acuerdo pactado y retrasa la carga de los bidones, pidiendo al personal que vuelvan a sus puestos de trabajo. Los trabajadores se niegan a entrar hasta que se carguen los bidones y alejen el Galerno de la fábrica a catorce millas, como estaba reflejado en el plan de evacuación pactado con anterioridad. La empresa, continuando con el plan que ellos sólos estaban siguiendo, una vez que se cargaron los bidones en el Galerno en el puerto de Morás ( próximo a la fábrica ), en lugar de salir para Holanda, lo fondean más cerca de la fábrica durante 21 horas más hasta el día 15/12/87.

Este era el tiempo que necesitaban los mandos intermedios y los jefes para hacer una parada programada en las cubas de electrolisis. Cuando pararon las cubas el barco salió para Holanda y los trabajadores entraron a sus puestos de trabajo, encontrando cerrados todos los cuadros con candados y sacados de los mismos aparatos electrónicos que eran imprescindibles para poner en servicio las cubas.

¿Por qué con todas estas irregularidades, no les pasa nada a los jefes y mandos intermedios, y no solo eso, sino que además fueron premiados económicamente?

El funcionamiento diario de las cubas de electrolisis era con 32 trabajadores y paran las cubas los días de los hechos con 44 mandos de las mismas acompañados por otros jefes de otros departamentos, en total estaban 70 personas.

6. El delegado de Trabajo, el gobernador civil de Lugo y otras autoridades no estuvieron a la altura de las circunstancias y dejaron parar la fábrica (que era lo que querían). Incluso el gobernador civil de Lugo mandó evacuar las casas próximas a la fábrica, pero no hizo lo mismo con los trabajadores que estaban más cerca de los bidones. A ninguno de los políticos que intervinieron en el proceso se les pidió ningún tipo de responsabilidad. Solo se le pidió responsabilidad a la parte más débil, que era el comité de empresa.

Pasados treinta años y después de los acuerdos tomados con responsables de la Xunta para una indemnización, seguimos a la espera de la misma porque estamos en crisis. El acuerdo fue tomado por unanimidad el 12 de marzo de 2008, y casi diez años después continuamos esperando.

7. Dijeron que se produjo el mayor desastre económico de la historia y no fue así, porque tuvieron los mayores beneficios como se demostró posteriormente en el año 1988 y posteriores años porque entre otros suspendieron un contrato con Japón que les estaba proporcionando pérdidas y se sacaron de encima un comité que denunciaba continuas irregularidades de desvío de dinero a través de los consejos de administración de la empresa pública.