El pasado día 10 denunciaba la nefasta política municipal de gestión de residuos altamente contaminantes, política que consiste básicamente en tapar con tierra estos residuos incumpliendo gravemente la normativa medioambiental en vigor y aumentando gravemente el riesgo de incendios, pues se produce en un zona con gran superficie arbolada.
La respuesta de la Sra. Loureiro y del Sr. Cal no pudo ser más desalentadora: negarlo todo y tratar, una vez más, de volver a echarle tierra al asunto, esta vez en forma de insultos. El problema es que la realidad es tozuda y, hoy en día, todos llevamos una cámara de fotos en nuestro móvil que desenmascara al mentiroso. La realidad es la siguiente: el Ayto. de Viveiro es dueño de una parcela situada al lado del punto limpio y en ella se venían depositando durante años toneladas y toneladas de residuos altamente contaminantes. Consecuencia de ello, la Guardia Civil (Seprona) realiza una primera denuncia, hoy ya son dos, por incumplimiento de la normativa medio ambiental, la ley del suelo y aumentar gravemente el riesgo de incendios. El Ayuntamiento, o quien fuera por orden del mismo, procedió a retirar los más voluminosos (neveras, lavavajillas, televisores,…) así como a tapar el resto con tierra, quedando aparentemente limpia. Finalmente, a sabiendas de que la Guardia Civil no iba a tragar con tan burdo intento de engaño, ordena la retirada de las toneladas de residuos previamente enterrados (cables eléctricos, ordenadores, ruedas...) que, salvo que la alcaldesa y su ayudante nos quieran convencer de lo contrario, no nacen de la tierra.
Lo que se negaron a responder
El PP presentó unas preguntas en el pleno municipal pero lejos de aprovechar la oportunidad para dar explicaciones a los vecinos, se negaron a responder porque, según sus palabras, se trataba de «una falta de respeto» y estaban realizadas con «un mal tono». Pues bien, nadie mejor que usted, vecino de Viveiro, para juzgar si es así y por eso transcribo las preguntas: «¿Quién dio la orden de tapar las toneladas de residuos peligrosos existentes en la parcela municipal? ¿Quién ejecutó dicha orden? ¿Qué coste ha tenido para el Concello tapar esos residuos, destaparlos y retirarlos? ¿No tiene el Concello un contrato para la gestión de esos residuos? ¿No está obligado el Concello a entregar todos esos residuos en el Punto Limpio para su correcta gestión por dicha empresa? Conocedores de que el Concello tiene abiertos dos expedientes por infracciones medioambientales, ¿en qué punto se encuentran dichos expedientes? ¿Tendrán repercusión para las arcas municipales?».
Recientemente, el Sr. Cal tituló un articulo al respecto como Provocación gratuita, De Olano; una vez más erró. Ni es provocación, pues se trata de información, y mucho me temo que tampoco será gratuita pues nos traerá, ojalá me equivoque, una multa grave al Concello que pagaremos todos los vecinos.