La lluvia frustró la primera procesión de la Semana Santa del 2010 en Viveiro. La Virgen de los Dolores no pudo desfilar el viernes por las calles de la ciudad y el inicio oficial de las celebraciones se aplazó hasta ayer, con el pregón de Carlos Nuevo Cal. El teatro Pastor Díaz se llenó de gente, para escuchar al cronista oficial y presidente del Seminario de Estudos Terra de Viveiro, quien detalló la evolución de la Semana Santa desde sus orígenes, en la Edad Media, hasta el siglo XXI, una etapa de máximo esplendor y renovación en todos los sentidos.
En su disertación, Nuevo Cal introdujo entrañables recuerdos de su infancia en Viveiro: «Estou vendo ao popular Heriberto de Heraldo, tocando a corneta na mañanciña do Encontro, en todas e cada unha das portas da vila, corneta que afinaba a base de regala cunhas copiñas de cañarola nas tabernas da ribeira. Tampouco esquecerei o día no que o recordado amigo Toñín Colosía me ensinou unha carpetita de ule cunhas contas da Orde Terceira que conservaba na súa casa, e onde se anotaban os gastos do Encontro dicindo, coa maior das inxenuidades, algo así como 'por hacer llorar a la Virgen..., tanto, por tirar a Cristo en la plaza..., tantas pesetas...».
En la basílica de San Martiño intervino Luis García Calvo, un madrileño vinculado a Foz desde hace 20 años, colaborador y amigo de la Confraría do Desencravo, responsable de organizar la Semana Santa. El pregón, al estilo sevillano, integró prosa y verso. En Ribadeo la encargada de abrir oficialmente las celebraciones de la Pasión fue Pepita Pedreira Pérez. Y en Burela le correspondió esta labor a la hermana Martina Sendino del Olmo, palentina de la congregación de las Hijas del Divino Celo y directora del Centro de Menores San Aníbal, ubicado en esta localidad mariñana.