La Xunta prepara un incentivo adicional a los 700 euros actuales para reactivar al peor mercado de España en octubre
03 nov 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Los concesionarios gallegos acaban de cerrar el peor mes de octubre desde hace 15 años. El mercado se ha desplomado un 50,8% y las 3.244 unidades despachadas en los últimos 31 días sitúan a la comunidad gallega liderando el ránking de las mayores caídas de matriculaciones en España.
En general, octubre ha sido un mes negro para la venta de coches en todo el país. El volumen total de matriculaciones fue de 61.366 turismos, un 37,6% menos que en octubre del 2009 pero, pese a este mal resultado, el balance acumulado es todavía positivo, y suma 848.555 turismos, un 9,4% más que el año pasado. No ocurre lo mismo en Galicia, en donde el 2010 ya es un 8,2% peor que el 2009 (el equivalente a 3.789 unidades menos vendidas en lo que va de año).
¿Por qué el mercado gallego, el único que, junto con el de Navarra, mantiene un plan de ayudas directas a la compra no da señales de vida? Los empresarios del sector consultados creen que el problema es que los consumidores desconocen la existencia de los 6 millones de euros en ayudas (de los que solo se habría consumido una cuarta parte) porque entraron en vigor en agosto, cuando media comunidad está de vacaciones, y no ha existido una campaña informativa para difundirlas.
3.000 empleos perdidos
Las mismas fuentes aseguran que la Consellería de Industria prepara un incentivo adicional a los 700 euros de ayuda media actuales, que aprobará de forma inminente para intentar reanimar el mercado más alicaído de un país que registra los peores resultados de ventas de coches desde que finalizó el Plan 2000E, el pasado mes de junio.
Hay otro factor que explica el hundimiento del mercado gallego y es su gran dependencia de las compras particulares (un 70%), en donde la demanda se encuentra más estancada en estos momentos a nivel nacional; frente a otras comunidades en las que pesan más otras opciones de negocio como las ventas a empresas o el renting.
Pero si los resultados de ventas presentados ayer son negativos, las valoraciones de los distintos colectivos empresariales afectados rozaron el alarmismo. La patronal de fabricantes Anfac advirtió seriamente de que si sigue esta tendencia a la baja, las multinacionales de coches pueden perder interés por invertir en un país con un mercado pequeño, y «podrían correr peligro posibles adjudicaciones de nuevos modelos a fábricas españolas». Sostiene que las plantas españolas han dejado de vender en el mercado nacional 1,3 millones de coches en los últimos tres años.
Faconauto, patronal de los concesionarios, calcula que, si no se revierte la situación, la destrucción de empleo que afecta a más de 3.000 personas, llegará a las 10.000 a final de año. La Asociación Nacional de Vendedores también fue contundente. «Ante la difícil situación de las ventas, los concesionarios puedan caer como auténticas fichas de dominó en los próximos meses» Para el 2011, Anfac y Ganvam manejan una previsión de matriculación por debajo de las 900.000 unidades, lo que supondría que, por tercer año consecutivo, el mercado español se situará en niveles de principios de la década de los 90.