La ministra y su número dos tachan las cifras de «osadía» y de estimación «sin ninguna base científica»
15 ene 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Las declaraciones del ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, en las que cifraba entre el 16 y el 20% del producto interior bruto (PIB), es decir, en torno a 200.000 millones de euros, el peso de la economía sumergida en España, han caído como un obús en otro ministerio, el de Economía y Hacienda, donde tanto Elena Salgado como su mano derecha, el secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, se apresuraron ayer a corregir sus palabras.
Desde Roma, donde mantuvo una reunión con el responsable de Finanzas italiano, Giulio Tremonti, la ministra Salgado sentenció que las cifras a las que Corbacho se refirió no son fiables. «No hay datos sobre la economía sumergida en España, como no las hay sobre la de ninguno de los países de nuestro entorno», declaró, para añadir que «por tanto, las estimaciones tienen únicamente ese valor: son estimaciones, en algunos casos procedentes de fuentes sin ninguna base científica».
Mientras que para la ministra las cifras manejadas por su homólogo de Trabajo carecen de fundamento, para su segundo de a bordo, José Manuel Campa, son, además, una «osadía».
Así lo manifestó el secretario de Estado de Economía al ser preguntado al respecto en la rueda de prensa en la que valoró los datos de la inflación. «Es excesivamente osado poner un número a algo que no se puede estimar, porque está sumergido», señaló.
Las cifras de la discordia
Igualmente, Campa apuntó que el ministerio no dispone de cálculos sobre el peso de la economía irregular en el PIB del país y que Corbacho se refería a estudios hechos por terceros, además de recordar que el propio ministro de Trabajo admitió que no había datos científicos.
Otros colectivos, como la Organización Profesional de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE) o la de Técnicos de Hacienda (Gestha), manejan cifras de fraude en el país incluso superiores a las apuntadas por Corbacho. Por ejemplo, en octubre del pasado año, en una propuesta de plan especial de actuación de la Administración Tributaria para luchar contra el fraude en época de crisis, la IHE estimaba que, en términos porcentuales, la economía sumergida nacional podría oscilar entre el 20 y el 25% del PIB, lo que equivaldría al doble de la cifra media en la UE. Igualmente, solicitaban que el Instituto de Estudios Fiscales (IEF) realizase un análisis este año para cuantificarla.
En el 2008, Gestha también avanzó cifras en este capítulo, afirmando que suponía el 23% del PIB, o lo que es lo mismo, 208.000 millones de euros. En aquel momento fue la Administración Tributaria quien desacreditó el dato, negando que existiera metodología alguna para realizar tal cálculo.
Lo que no ha cambiado es la reclamación de las organizaciones al Ejecutivo para que diseñe un plan eficaz de lucha contra la economía irregular, a la que Corbacho se refirió como «una constante y no una coyuntura» en España, pues «existe incluso en época de bonanza», aunque admitió que «lógicamente se incrementa con la crisis».
Por su parte, el portavoz de Economía del PP en el Congreso, Cristóbal Montoro, responsabilizó ayer a Corbacho en una entrevista en TVE del incremento de la economía sumergida. Y para combatirla propuso una bajada impositiva, que contribuiría a elevar los ingresos del Estado.