Con una inversión de 2,5 millones, las obras de renovación han permitido ganar 4.000 m2
28 feb 2011 . Actualizado a las 14:34 h.La «sala de estar de todos los coruñeses de Monte Alto». Así definía Mario López Rico, concejal de Rehabilitación, la nueva plaza de España, que ayer se inauguró oficialmente tras las obras de remodelación. Entre juegos infantiles y animadores, la plana mayor del gobierno local desfiló ayer por una plaza que ha ganado espacio para los peatones. En total, las actuaciones han permitido ganar 4.000 metros cuadrados a lo que antes era asfalto, hasta los 18.000 que ahora componen la plaza.
A las obras del Campo da Leña, el nombre histórico que ahora se recupera para englobar el entorno que va de la plaza de España hasta la plaza del cuartel de Atocha, se han destinado en los últimos meses 2,5 millones de euros, que además de renovar el pavimento y el mobiliario urbano han permitido plantar 70 nuevos árboles e instalar más juegos infantiles. Todo, explicó López Rico, con el objetivo de «ampliar os espazos destinados aos peóns» pero también salvar alguno de los olmos centenarios que presiden la plaza «aos que xa lle tivemos que poñer algunha prótese, porque á xente maior hai que coidala». Ironizaba el concejal nacionalista que, tras las elecciones de mayo, a las que no concurrirá, él mismo pasará más tiempo en los bancos de la plaza de España «tomando o soliño».
Eso sí, aprovechó la inauguración de uno de los proyectos estrella de su departamento para reivindicar la labor de «un goberno que sabe traballar para os cidadáns, por riba de plantexamentos políticos distintos, polo ben da Coruña».
Más que acupuntura
Por su parte, el alcalde destacó que la renovación de la plaza de España va más allá de la acupuntura urbana que se está practicando en otras zonas de la ciudad para «recuperar el corazón de Monte Alto». Reivindicó Javier Losada la actuación del Ayuntamiento en las calles colindantes y puso el acento en que las obras «se han hecho hablando con los vecinos, llegando a acuerdos y con la ayuda de las instituciones que también comparten este espacios» como el colindante cuartel de Atocha.
El alcalde defendió las últimas renovaciones ejecutadas en la ciudad, desde Pablo Picasso a General Sanjurjo, y lo hizo apuntando que «estamos haciendo una Coruña mejor, más para las personas y menos para los coches».
Y, frente a las «mentiras» que a su juicio se están vertiendo sobre estas actuaciones, Losada defendió que «una ciudad que no quiere avanzar es una ciudad muerta y yo quiero una ciudad viva, con mejores espacios y más calidad de vida para los ciudadanos».
Satisfacción por las obras
Los vecinos que a mediodía de ayer se agolpaban en la plaza de España daban el visto bueno a la remodelación. Argumentaban que se ha ganado espacio para los peatones, para los locales de hostelería de la zona, que ahora podrán ampliar sus terrazas, y para los niños, que jugarán más seguros. «Antes se te podían escapar y como pasaban coches era un peligro», explica Dolores Pereira. Con todo, la ordenación del tráfico en las calles que delimitan la plaza es el mayor pero que le ponen los vecinos a las obras. Alguno, como Antonio Gómez, valora el nuevo espacio peatonal, pero critica que no se haya previsto ningún estacionamiento en el barrio que desatasque de coches las calles colindantes al nuevo pulmón de Monte Alto.
«La plaza quedó muy bien, hay más espacio y más asientos, pero aquí se protesta por todo»
María Dolores Pereira
«Hay demasiado cemento, es más de lo mismo, y alguno de los árboles corre riesgo de caerse»
Antonio Gómez
«Me gusta que haya tantos bancos y que hayan recuperado el nombre de Campo da Leña»
Azucena