Quince vecinos abandonaron sus viviendas ayer por la noche porque el edificio tenía grietas y un socavón que dejaba varios trasteros al aire.
01 nov 2011 . Actualizado a las 01:39 h.El número 18 de la calle Colombia de Vigo ha sido desalojado esta tarde. Los informes de los técnicos de Urbanismo del Concello de Vigo han aconsejado liberar las nueve viviendas del inmueble como medida preventiva ya que necesitan más datos para poder evaluar su situación. Ayer por la noche quince personas del edificio colindante, el número 20, tuvieron que ser desalojados por el riesgo de derrumbe que presentaba el inmueble. El desalojo tuvo lugar a las 22.20 horas de ayer ante las grietas existentes en el edificio, que hacían peligrar su estabilidad.
En concreto, el inmueble presentaba grietas en su fachada, en el suelo y en su muro noroeste, con un socavón al pie del edificio que «dejaba parte de los trasteros al aire», según indicaron los bomberos. El regidor vigués, Abel Caballero, ha informado que los técnicos han reconocido que son problemas «severos» y que los vecinos no podrán volver a sus viviendas en semanas, ya que habrá que rehacer los cimientos, cubrir grietas y realizar otras acciones de cierta envergadura.
Los técnicos de la Gerencia de Urbanismo, que visitaron esta mañana la zona, revisaron el estado del número 20 pero también de otros edificios de la calle. En el número 18 se detectaron grietas y, por eso, se sugirió su desalojo preventivo mientras que en el número 22 no se detectaron señales que hagan temer por la seguridad por lo que sus vecinos podrán permanecer en sus casas.
Todo apunta a que el origen de las grietas y socavones son las obras que se están realizando en un solar cercano. De hecho, la comunidad de vecinos ya presentó una denuncia contra la constructora hace unos meses. Tras lo ocurrido en las últimas horas, la teniente de alcalde, Carmela Silva, ha instado a la empresa que acomete las obras que reponga urgentemente la situación de seguridad en estos inmuebles de la calle Colombia.
De los quince desalojados en la noche de ayer, diez vecinos optaron por realojarse en casas de familiares y de otros cinco se ocupó el ayuntamiento vigués. A los que se desalojarán esta tarde se les darán las mismas opciones y Caballero anunció que incluso se planteará la posibilidad de ofrecerles un hotel para dormir a aquellos vecinos del número 22 que quieran abandonar su vivienda, aunque insistió en que los técnicos municipales garantizan la seguridad de su inmueble.