El plan prevé el envío de una fuerza de paz de la ONU y la creación de una franja de seguridad en territorio eritreo Etiopía y Eritrea firmaron ayer en la capital de Argelia un acuerdo de paz para poner fin al conflicto armado surgido de un litigio fronterizo entre los dos países y que se ha saldado con la muerte de miles de personas desde mayo de 1998. El acuerdo, «aplicable inmediatamente», es el resultado de largas y laboriosas negociaciones y fue firmado en un acto protocolario por los ministros de Exteriores de Eritrea y Etiopía, Haile Woldensae y Seyoum Mesfin, en el Palacio del Pueblo de Argel y en presencia del presidente argelino, Abdelaziz Buteflika, presidente en ejercicio de la Organización de la Unidad Africana (OUA). En una breve intervención tras la firma del acuerdo, los dos ministros se comprometieron a respetar todas las disposiciones contenidas en el texto.