Una nueva espiral de violencia causa más de 50 muertos en Argelia en cuatro días

SAMIR KNAYAZ. Efe ARGEL

INTERNACIONAL

Un comando integrista que mató a diez soldados ha sido rodeado por el Ejército Más de cincuenta personas, entre civiles, miembros de las fuerzas de seguridad e integristas armados, han muerto en Argelia en los últimos cuatro días en una nueva espiral de violencia. Las dos acciones más mortíferas tuvieron lugar el martes en Djelfa, al sur del país, y el viernes en Mascara, al oeste, con un total de 43 muertos y otros tantos heridos. En el atentado de Djelfa, el blanco fue un convoy del Ejército a la caída de la noche. Los autores siguieron un método clásico en el que hicieron explotar una serie de artefactos de fabricación casera escondidos en el arcén de una carretera antes de abrir fuego contra su blanco.

17 jun 2000 . Actualizado a las 07:00 h.

Diez soldados murieron en el ataque y un número sin determinar resultó herido, pero los autores del atentado sufrieron también importantes pérdidas. Al aproximarse a sus víctimas, probablemente para apoderarse de sus armas, uniformes y material de comunicación, los agresores fueron sorprendidos por otros soldados del convoy y veinte de ellos resultaron muertos en el enfrentamiento. Sus cómplices huyeron en dirección a las montañas de la región, pero unidades especiales del Ejército, que iniciaron la persecución unas horas después del atentado, los han localizado y rodeado. Este atentado ha sido atribuido al Grupo Salafista para la Predicación y el Combate, dirigido por Hacen Hattab y especializado en las emboscadas contra los servicios de seguridad. Este grupo ha declarado su hostilidad a la gestión de reconciliación del presidente argelino, Abdelaziz Buteflika.