Socorro García critica duramente el proceso de expropiación y sus prisas, cuando el tren «aínda vai para largo»
19 jun 2009 . Actualizado a las 02:00 h.El BNG ni está de acuerdo con el proyecto de la entrada del AVE en la ciudad ni con como se abordó el proceso de expropiación. Especialmente crítica con este último aspecto, la portavoz nacionalista, Socorro García Conde, tachó ayer de «poco elegante» dicho proceso y denunció la carencia de «calquera norma de bo comportamento e transparencia administrativa», toda vez que «moitos veciños se enteraron da expropiación polos operarios que facían as medicións nas fincas».
La líder municipal del Bloque aprovechó la visita que mañana hará el ministro de Fomento, José Blanco, para dar el pistoletazo de salida a la esperada construcción de la terminal del aeropuerto, para hacer públicas sus demandas sobre este proyecto, demandas que pretende explicar personalmente al responsable ministerial.
Los nacionalistas apuestan por soluciones menos traumáticas tanto para el barrio como para los particulares afectados, como la construcción en falso túnel de la entrada de la alta velocidad desde Angrois al Combarro, allí donde técnicamente sea posible. Y donde no lo sea, defiende la construcción con muros de pantalla, no en trinchera, como está previsto, una opción que precisa más terreno y que por tanto afecta a más particulares. Ahora mismo, Fomento prevé solo que el AVE discurra entre muros pantalla (no iría cubierto) en unos 300 metros, cuando el trayecto que plantea el BNG, y en falso túnel, llega a 1,6 kilómetros.
Se trata únicamente de que primen los criterios técnicos sobre los economicistas, según García, quien entiende que en una obra de la cuantía del AVE debería ser asumible un sobrecoste para aportar la mejor solución para el Castiñeiriño, Angrois y toda la zona afectada, donde con el actual proyecto podrían tener que derribarse en torno a medio centenar de viviendas. El BNG considera que con su propuesta «se salvarían case todas as casas», por lo que pide a Fomento que revise un proyecto «que ten dudas», que lo estudie «con rigor» y que cuente con el Concello y los vecinos.