Delfín Fernández señala que este patrón está detrás del descenso de actas por tenencia de estupefacientes
26 jun 2008 . Actualizado a las 02:00 h.El subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Delfín Fernández Álvarez, afirmó ayer que el aumento de los controles policiales en O Vao, así como en sus inmediaciones, han llevado al toxicómano «a consumir droga en el propio poblado».
Matizó que a raíz de ejercer una «sistemática presión» por parte de los agentes de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía en el entorno de O Vao, el número de actas abiertas a personas por tenencia o uso de droga en la vía pública descendieron en los cinco primeros meses del presente año comparado con el mismo periodo de 2007. Detalló que de las 455 actas levantadas entre enero y mayo de 2007 se pasó a 269 este año.
Delfín Fernández añadió que nueva de cada diez actas abiertas por tenencia o consumo de estupefacientes en la vía pública en O Poio tiene su origen en el poblado de O Vao. Explicó que en muchas ocasionas al individuo registrado no se le detectara nada «puesto que el consumo ya se hizo en O Vao. Los controles son sistemáticos, por lo tanto, la gente va allí y consume allí».
Las manifestaciones del subdelegado se produjeron después de llevarse a cabo la celebración de la junta local de seguridad de Poio. Por su parte, el alcalde, Luciano Sobral, recordó que la Policía Local también realiza controles y cacheos en el poblado marginal, así como en su entorno más inmediato.
Tal y como detalló el subdelegado, las actas levantadas motivadas por los estupefacientes son usos o tenencias en la calle. «En los lugares privados no se puede intervenir a excepción de que se disponga de una orden judicial. La policía no puede entrar en una vivienda cuando quiera, aunque esta vivienda sea una chabola».
Menos vehículos
Las autoridades constataron además un descenso en el número de drogodependientes que se desplaza hasta el poblado en vehículos procedentes de fuera de la comarca «que venían habitualmente al Vao, sobre todo, de la zona de Santiago y Ribeira, presumiblemente a consumir o a suministrarse de droga».
Por otro lado, el subdelegado destacó que el flujo de personas que entran y salen del poblado marginal, generalmente, es el usual. Pero O Vao sigue siendo un objetivo prioritario de las fuerzas de seguridad. «Es evidente que en el Concello de Poio el poblado de O Vao tiene un peso importante en la contabilidad de la delincuencia», recalcó el subdelegado, agregando que hasta allí siguen llegando coches y objetos robados en otros ayuntamientos.