
Águeda Ubeira es la CEO de Vanetta, empresa que elabora platos tradicionales como zorza o milanesas con aspecto cárnico pero elaboración a base de vegetales que están en su web, tiendas, hostelería y en breve en grandes superficies
15 may 2025 . Actualizado a las 16:38 h.Como su predecesora natural, la carne vegana gallega ya está posicionándose entre las más importantes del mercado en cuanto a innovación, investigación y variedad. La empresa viguesa Vanetta, con sede en Nigrán, acaba de ser una de las diez seleccionadas en el programa Galicia Avanza de la Xunta y Tecnópole, para internacionalizar sus productos. Águeda Ubeira está detrás de esta firma que hace una década arrancaba en Gondomar con una empresa enfocada hacia el dulce, llamada Chupipostres, y más tarde, un restaurante vegano en Vigo. Todo eso quedó atrás (incluso las panteras rosas por las que la gente todavía llora) para centrarse desde hace tres años en la fabricación y distribución de alimentos veganos con base vegetal. Su primer paso en este sentido fue la zorza.
«Ahora tenemos varios tipos de cachopos con diferentes rellenos, tenemos croquetas también vegetales, y milanesas a base de proteína arroz y almendra al estilo tradicional, tipo pollo; y además, empanadillas que hacemos en colaboración con una creadora de contenido. Eso es lo que tenemos ahora mismo en el mercado, junto con la zorza y el lomo», resume insistiendo en que «no somos sustitutos».
La base de estos alimentos son las proteínas vegetales, de trigo, soja, almendra y arroz. La milanesa estilo pollo tradicional está basada en la proteína de almendra y proteínas de trigo y de arroz; y para los cachopos utilizan la de trigo y un fermentado de anacardos. Las croquetas vegetales llevan proteína de soja con tres tipos de rellenos: zanahoria, curri y espinacas, además de las que elaboran en colaboración con la marca Rollito Vegano, «que tienen un producto que ellos llaman sin jamón y nosotros, croquetas sabor sin jamón. Son como si fuesen unas croquetas de jamón de toda la vida, en formato vegetal», aclara.
Las empanadillas que hacen con Patricia Menéndez —conocida en redes como Patri Medio Limón, influencer y cocinera con más de 150.000 seguidores en Instagram— están hechas con masa de empanada tradicional y tienen tres tipos de rellenos, de espinacas con bechamel vegetal, de soja estilo zorza de Vanetta, y de seitán estilo lomo adobado con un fundido vegetal, definición esta última que aplica para no utilizar la palabra queso. La responsable de Vanetta añade que Patricia no solo poen el nombre, sino que entra en el proceso productivo y en el desarrollo de las mismas, incluso. «Es un producto que hemos... Hemos co-creado», indica.
Ubeira es la consejera delegada de la pequeña empresa con nueve trabajadores, con base en el polígono de Porto do Molle, en Nigrán en la que Manuel Vila es el confundador en esta aventura y responsable del departamento de producto y tecnología.
El lenguaje es uno de los problemas añadidos a un tipo de alimentación a la que se suma cada día más gente en el mundo por múltiples motivos. Palabras como carne o queso que no se pueden usar o se aplican con un no delante para no confundir a los consumidores o crear malentendidos. «Es complicado hablar porque no existen palabras para definir las cosas, es complicado. Cuando estamos en ese proceso, la responsable de márketing a veces me dice si no podemos acortar esta frase y yo le digo que no, que tiene que poner: preparado vegetal con loncheado, aunque lleve una etiqueta que dé varias vueltas al envoltorio», ejemplifica con humor. Águeda Ubeira recuerda que para Vanetta eso es esencial. «Nosotros desde el primer momento hemos decidido ir con el nombre vegetal por delante y no utilizar otras cosas, sino que siempre hemos defendido que somos soja, que somos seitán y eso dificulta a veces las explicaciones», indica reconociendo que sería más fácil decir que es un cachopo relleno de queso, bacon y pimientos, «pero aunque esté igual de rico, es que es un preparado vegetal, rebozado, relleno de un preparado vegetal estilo loncheado», reconoce, aunque advierte que hay una sentencia reciente desde la UE en la que se especifica que sí se pueden utilizar términos cárnicos acompañándonos de la palabra vegetal o de la palabra vegana. El problema principal está con el sector lácteo, en este caso. Pero desde Vanetta estamos de acuerdo con una regulación de términos y la usamos desde el primer momento.
Los productos de Vanetta, además de en web, están ahora en cerca de 150 puntos en la península y Canarias. «Estamos sobre todo en tiendas especializadas, herboristerías, tiendas eco y bio, tiendas veganas y fruterías. Desde el principio hemos entendido que somos legumbres y para nosotros era algo lógico, y estamos a puntito de entrar en tres grandes superficies a la vez», avanza, sin poder dar más pistas por ahora. Sus productos también están en hostelería, en el hotel Attica 21, en la bocatería Papos y en Agacha a Testa, y muy pronto en el Bar Primavera, en Vigo; en el Parador de Baiona o en el Talaso de Oia. Y con su Food Truck van a eventos como el Viña Rock o el Interestelar de Sevilla, entre otros muchos.