Critican que no puedan estacionar sus vehículos en las calles adyacentes en el tramo hacia la plaza de América como lo hacen los que viven cerca de Urzaiz
29 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Cansada de ir a quejarse, una vecina de Vigo ha acabado haciendo amigos en el Ayuntamiento. Son aquellos a los que de forma recurrente acude a exponerles el problema sin que le puedan ayudar.
La situación de Mari Carmen Ferreira es la de muchos vecinos de la Gran Vía que viven entre la Plaza de España y la Plaza de América. Hasta hace dos años, gozaban de tarjetas de residentes que les permitían aparcar en las plazas de zona azul de calles adyacentes. Pagaban por ello un canon anual de 90 euros a la administración local. Más o menos tenían resuelto el problema del estacionamiento, hasta que el Concello decidió no seguir expidiéndoles estas tarjetas.
Decenas de vecinos se vieron entonces con el problema de dónde dejar sus vehículos, teniendo en cuenta que muchos residen en edificios antiguos que no cuentan con garajes.
Mari Carmen es una de ellas. Reside en un inmueble diseñado por Desiderio Pernas frente al IES Santo Tomé de Freixeiro que no lo tiene. Desde entonces, buscar un lugar donde dejar el coche se ha convertido en un calvario y más todavía cuando se ve obligada a cambiarlo de sitio cuando pasan las dos horas establecidas, sino tiene más remedio que dejarlo en zona azul. Ya le han puesto varias multas, tanto a ella como a su hija.
Un agravio
Lo que cree que resulta un agravio comparativo es que esta situación no sucede en el otro tramo de la Gran Vía, de la Plaza de España a Urzaiz. Allí los vecinos sí conservan las tarjetas de residentes para poder aparcar en las calles aledañas. «Los que damos a la plaza de América somos ciudadanos de segunda», protesta esta ciudadana.
Fuentes de la Policía Local explican que los vecinos de la Gran Vía de la zona de Urzaiz sí disponen de tarjetas de residentes porque carecen de aparcamientos en la calle, mientras que cerca de la plaza de América hay un tramo largo en el que sí podrían estacionar los vehículos. Eso explicaría el trato desigual que sufren los ciudadanos que residen un tramo de la Gran Vía, respecto del otro.
No obstante, los vecinos de la zona cercana a la plaza de América consideran que es el espacio para dejar sus vehículos resulta insuficiente y reclaman al Concello que les devuelvan las ventajas que gozaron hasta hace poco tiempo para aparcar en avenidas como Gerona o Regueiro. Mari Carmen lo seguirá pidiendo con frecuencia. «Ya soy muy conocida en el Concello», asegura esta ciudadana, que ya ha perdido la cuenta de las veces que ha acudido a quejarse al Ayuntamiento. «Va a hacer dos años que estoy poniendo reclamación tras reclamación».
Lamenta además esta ciudadana que en la calle González Sierra, donde podrían espacio para aparcar, «pusieron carga y descarga y han dejado sin poder aparcar a todos los vecinos de ese bloque».