«Frankenstein tiene erótica»

Jorge Lamas Dono
jorge lamas VIGO / LA VOZ

VIGO

Maximino Cacheiro crea una antología del mito amoroso de la literatura europea en un libro que completa con un homenaje a los exiliados en París

28 oct 2011 . Actualizado a las 11:23 h.

«La Bella y la Bestia es amor y sexo», explica Maximino Cacheiro, autor de Contos de paixón erótica (Toxosoutos), mientras lee en clave húmeda el encuentro entre los dos personajes del cuento infantil. El profesor de la Universidad de Vigo ha recogido fragmentos de autores clásicos de la literatura europea para confeccionar una antología del erotismo. «Es una antología de textos clásicos reescrita, es decir, es la primera antología de la literatura occidental de textos eróticos escrita en lengua gallega, en la que aparecen desde Homero a Valle-Inclán, pasando por William Shakespeare, Franz Kafka o Marcel Proust», añade el escritor.

El profesor de Literatura opina que la época del erotismo por antonomasia ha sido el siglo XVIII, «el francés», puntualiza. Aunque tampoco quiere olvidarse de la Grecia clásica y todo su lío de dioses y amantes. Era y Zeus, Safo o Albicíades marcan el inicio de un recorrido que no da la espalda a clásicos españoles como La Celestina, o referencias inevitables a la literatura de terror. «Frankenstein tiene erótica, claro que esto hay que leerlo», explica muy convencido el profesor vigués. Tanto como el gallego Ramón María del Valle-Inclán: «La niña chole es un cuento que rezuma erotismo; es la entrega al marqués de Bradomín. Vallé-Inclán es sumamente erótico», señala Maximino Cacheiro.

Se trata de reescribir temas y motivos eróticos paradigmáticos de la evolución de la literatura erótica occidental, de tal forma que sea una antología de mitos eróticos modernizados.

«Historias da Boule d?or»

Las apasionantes noches de tertulia en torno a Agustín García Calvo, en el París de los españoles exiliados se suma a la antología erótica en el anexo Historias da Boule d?or. Se trata de una serie de cuentos inspirados en varios personajes que pululaban en torno a la tertulia fundada por Agustín García Calvo en el barrio latino de París.

«La tertulia se celebraba en horario nocturno en el café Boule d?or, hoy ya desaparecido. Agustín García Calvo, aglutinador de voluntades e intelectual, presidía más o menos aquellas reuniones, que fueron un referente mítico entre los progresistas radicales en los últimos momentos del franquismo», afirma Cacheiro Varela, testigo forzoso de aquella época

El profesor se vio obligado a exiliarse en 1967 por motivos políticos, una situación que se prolongó hasta 1976 en París y que tuvo su continuación, otros siete años, en Venezuela. «Era frecuente que los participantes intercambiasen experiencias existenciales, estimuladas de vez en cuando por alguna hierba mágica. Era un tótum revolútum de exiliados, marginales, emigrantes, aventureros de variado sentir y pensar, que vivían la modernidad más o menos antisistema española y francesa, o mejor dicho, universal», afirma. Algunos de aquellos clientes de la Boule son Rafael Sánchez Ferlosio, su hermano Chicho, Fernando Savater, Félix de Azúa, Víctor Gómez Pin o Javier Etxeverría.

«Quiero rendirles homenaje a todos ellos sin otra pretensión que la de deleitar y revivir una parte afectiva de la memoria. Fue una movida antes de la movida, aquí llegó en los ochenta cuando nosotros ya la teníamos en los setenta», recuerda.

El profesor aclara que «son personajes más o menos reales», para concluir: «Dentro de lo malo que es un exilio, aquello fue una liberación personal porque vivíamos en libertad».

En la Sonata de estío, el marqués de Bradomín conoce a la niña chole.

Frankenstein tampoco se resiste al erotismo.

Uno de los cuentos se titula Tálamo con Era y Zeus.

«Vivimos en Francia una movida antes de la movida en España»