Juan Perro se traduce al gallego

VIGO

Menos de quinientas personas saborearon el excelente concierto que dio Santiago Auserón en la Estación Marítima

07 ago 2009 . Actualizado a las 11:32 h.

Santiago Auserón está viviendo una etapa artística similar a la que pasea sin cesar por el ancho mundo el viejo y sabio Bob Dylan. Ambos se han empeñado en comprender sus respectivas raíces musicales, y las buscan por todo el universo musical.

Con el pasaporte de Juan Perro, Auserón ha viajado a Luisiana para hurgar en los orígenes de aquellas músicas que prendaron en sus sentidos cuando era un chaval. En su equipaje, el ex cantante de Radio Futura metió todo lo aprendido con los soneros cubanos a lo largo de la década de los años noventa.

El resultado de semejante viaje iniciativo pudo intuirse en el repertorio que ofreció Juan Perro el pasado miércoles, en el muelle de Trasatlánticos de Vigo. Un cuarteto semiacústico, compuesto por excelentes músicos cubanos, repasó algunas de las canciones más relevantes de la primera etapa discográfica de Juan Perro, al tiempo que mostraba la nueva línea compositiva de Auserón, en la que surge lo aprendido en Nueva Orleans.

Después de hacer un guiño a los desaparecidos Kremlin y Malecón, Santiago Auserón abrió el concierto con una de las nuevas canciones, Río Negro , que a pesar de su nombre se sitúa en los sonidos blancos norteamericanos próximos al hillbilly. Y es que el músico zaragozano no ha querido discriminar sonidos en función del color de la piel de quienes los han experimentado tradicionalmente, y el blues, jazz primitivo o el folclore norteamericano se dan cita en sus nuevas composiciones de una manera natural, a la que el cantante adapta su versátil voz con un resultado vistoso.

Pero tampoco Santiago Auserón ha olvidado su pasado sonero, y quizá es en Malasaña , otra de las nuevas canciones, donde conviven de una forma más evidente las dos referencias geográficas que han orientado la nueva línea de trabajo de Juan Perro.

El concierto fue muy sobrio. Todo el protagonismo lo tuvo la música. Ni siquiera Auserón quiso darse mucho protagonismo, aunque mantuvo una constante complicidad con el público, especialmente cuando atacó un tema, cantándolo en gallego con un acento aceptable. No es la primera vez que lo hace. Se trata de La Misteriosa , una canción de aire marinero que se encuentra en el álbum Cantares de vela . Gaiteiriño alguien le llamó.

Aunque el propio Santiago Auserón advirtió que a este nuevo repertorio aún le falta mucho recorrido, es plausible el giro musical que ha adoptado el músico en esta nueva etapa. Otra cosa es la escasa respuesta que Vigo dio al concierto. A penas quinientas personas, siendo generoso, pagaron la entrada de este concierto, organizado por un promotor privado que seguramente ha perdido mucho dinero en su apuesta por Vigo.

Antes de Juan Perro, Narf desató una auténtica furia eléctrica en su breve concierto, en la que destacó de una forma especial el guitarrista.