Fonseca desplegó en Madrid todo su carisma

Soledad Antón soledad.anton@lavoz.es

VIGO

11 jul 2008 . Actualizado a las 11:21 h.

Fueron los que reunió el pasado miércoles José María Fonseca o, lo que es lo mismo Terras Gauda, en el hotel madrileño con motivo de la presentación en sociedad del concurso de cartelismo Francisco Mantecón, que este año alcanza su edición número siete. Seguro que en semejante respuesta tiene mucho que ver la especial bonhomía que rezuma el bodeguero rosaleiro.

Como ya es habitual, ejerció de presentador Fernando Ónega, su hombre talismán como el propio Fonseca le ha llamado más de una vez. Ellos sabrán por qué.

Entre los que no se perdieron la cita de Ritz cabe citar a José Blanco, flamante vicesecretario del PSOE; el senador Manuel Fraga o el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes Francisco Caamaño por lo que al capítulo político se refiere. También asistieron la actriz Ángeles Martín, la periodista Carmen Rigalt y un considerable número de directores de medios de comunicación y corresponsales extranjeros de lugares tan dispares como Japón (nacionalidad del ganador del concurso en 2006), Estados Unidos, México o Gran Bretaña.

Por supuesto no faltó el padrino de esta nueva edición, el gráfico Peret, que recogió el testigo de su antecesor, Manuel Estrada.

Terras Gauda ha incrementado la cuantía económica del premio, que pasa a ser de 10.000 euros, además de crear sendos accésits de 2.000 euros cada uno. Tal vez así el jurado lo tenga un poco más fácil, pero sólo un poco porque el año pasado tuvo que elegir entre 1.300 obras. Este, a saber. Los interesados tienen hasta el 30 de septiembre para presentar sus trabajos.

Otro que estaba de estreno el pasado miércoles era Beny Fernández a propósito de la salida al mercado del nuevo Maserati. En realidad, según explicó el más conocido concesionario de coches de la ciudad, más que nuevo lo que se ha hecho es darle un nuevo aire con unos pequeños retoques.

Hasta el local de la calle Camelias se acercaron algunos de los forofos de Maserati que, dicho sea de paso, no es un coche que esté al alcance de todos los bolsillos. Para que se hagan una idea hay que preparar un cheque con cinco ceros. Uff.

Ayer corrían a cuenta de los comerciantes del Casco Vello. Al menos las que se sirvieron en la carpa instalada al efecto en la plaza de la Princesa con motivo del Concurso de Tapas Vigovello. En total aguardaban a los potenciales clientes dos mil pinchos, que se acabaron en un abrir y cerrar de ojos.