Los gobiernos corrigen los desfases de sus canales autonómicos

laura morgade REDACCIÓN / LA VOZ

TELEVISIÓN

Valencia y Madrid encabezan los recortes más duros para sus televisiones

10 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Las televisiones autonómicas están en el punto de mira de los gobiernos como objetivo de unos ajustes económicos que acabarán por redefinir el modelo de los canales regionales, unas plataformas que pierden audiencia y publicidad mientras su déficit continúa creciendo.

Valencia y Madrid son las comunidades que encabezan los recortes más duros para sus canales. El consejo de administración de Radiotelevisión Valenciana aprobó en agosto un ERE que afectará a 1.198 empleados y dejará la plantilla en 480 trabajadores, una medida que forma parte de un plan integral de reestructuración del grupo y que supondrá un ahorro de entre 40 y 42 millones de euros anuales. Aprobado el ajuste, el comité de empresa de Canal 9 advirtió que ese es el modelo que se quiere trasladar al resto de las televisiones autonómicas.

El vaticinio parece estarse cumpliendo en el caso de Telemadrid, que arrastra una deuda de 242 millones de euros y a la que la comunidad le ha colgado el cartel de «se vende». Su presidente, Ignacio González, ha asegurado que se planteará cerrar este canal «insostenible» si no consigue externalizarlo y sacar adelante un ERE que reduzca «de manera importante» una plantilla de 1.170 empleados. En unos días se conocerá el resultado de un estudio de viabilidad por el que la comunidad de Madrid pagó 140.000 euros y que incluirá un plan para despedir a unos 700 trabajadores.

Sobre la televisión de Castilla-La Mancha, con 431 empleados, también planea la amenaza de los despidos, igual que en el canal autonómico de Canarias, donde la empresa privada que realiza sus informativos, Videoreport Canarias S.A., presentó un expediente de regulación de empleo para despedir a 44 de sus 280 trabajadores.

La televisión de Murcia ha desaparecido de la parrilla desde que el Gobierno decidió rescindir su contrato con la empresa GTM, concesionaria del servicio desde la creación del canal en el 2006, y comunicó un ERE para 250 trabajadores. Una unión temporal de empresas del grupo Secuoya se hizo hace un mes con la concesión de sus informativos, lo que ha convertido al canal en pionero a la hora de privatizar sus servicios desde que la nueva ley audiovisual autorizó a los canales a adoptar el modelo de gestión público, privado o mixto que cada uno estime más oportuno para sus intereses.

Asturias rebajará de forma «muy significativa» el presupuesto de su radio y televisión públicas para el próximo ejercicio y también Cataluña estudia fórmulas para garantizar la viabilidad de TV3, cuya plantilla teme recortes tras las elecciones del día 25. Sus temores están fundados, ya que hace unos meses algunos empleados recibieron en su correo un documento con datos confidenciales de los trabajadores y el cálculo de lo que supondría un expediente de regulación de empleo. Con un presupuesto de 213 millones de euros y unos 2.000 trabajadores, TV3 ha dejado de pagar a proveedores por falta de liquidez.