Las televisiones de pago solo tendrán que contribuir con un 1,5% de sus ingresos a la financiación de RTVE, frente al 3% que aportarán las televisiones privadas en abierto, a lo que se suma el 0,9% de las operadoras de telecomunicaciones. Así consta en el proyecto de ley aprobado ayer en el Consejo de Ministros, que se remitirá al Parlamento para tramitarlo por el procedimiento de urgencia.
El texto, que eliminará la publicidad de la cadena del Estado, ha sido rechazado por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT), aunque su parecer no era vinculante. Sí se ha recogido una petición de este organismo para que se elimine la sanción que dejaría sin licencia a los operadores que no pagaran su correspondiente tasa, a los que ahora se aplicará la multa correspondiente que establece la Ley General Tributaria.
El Consejo de Estado informó de forma favorable el anteproyecto. No así la CMT, que recogió el rechazo frontal de las operadoras de telecomunicaciones a pagar ese 0,9% de contribución. Las operadoras están dispuestas a acudir a instancias judiciales para dirimir esta cuestión, pero ahora algunas tendrán que contribuir también con el 1,5% ya que tienen televisiones de pago, como es el caso de Imagenio (Telefónica) o de Ono, con servicios de telefonía y televisión por cable. Este pago del 1,5% también afectaría a Gol TV, el canal que Mediapro pretende abrir en septiembre. De la misma manera, otras cadenas de pago que puedan inaugurarse en el futuro a través de TDT tendrán que abonar este mismo porcentaje de sus ingresos.
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha vuelto a referirse en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros al modelo que el Gobierno quiere para TVE, citando como ejemplo a la BBC inglesa. Una televisión «competitiva, mayoritaria y de calidad», que tenga una estabilidad financiera e independencia económica con los recursos públicos. El Estado contribuirá vía Presupuestos con la mayor financiación, un 45% del presupuesto de RTVE, mientras que otro ingreso vendrá al percibir el 80% de lo recaudado por la tasa sobre la reserva de dominio público radioeléctrico.
Limitación de derechos
Los ingresos estatales solo se destinarán en la Corporación a financiar actividades de servicio público «y no podrán ser utilizados para sobrepujar» frente a competidores por derechos de contenidos de gran valor. Así lo establece el proyecto de ley, en referencia a la compra de cine a las productoras de Hollywood y también respecto a los eventos deportivos. TVE, como ya se establecía en el anteproyecto, solo podrá destinar el 10% de sus ingresos del presupuesto de aprovisionamiento y compras a adquirir derechos deportivos. La cadena pública contará desde el año próximo, y durante tres años, con la exclusiva de la Liga de Campeones, por la que pagó 29 millones de euros por temporada, una oferta que ya tiene asegurada y no parece contravenir la norma.
Las televisiones privadas en abierto, agrupadas en Uteca, han vuelto a saludar «con alegría» una medida que consideran «valiente» y esperan que el resto de las televisiones públicas sigan el mismo camino en los próximos meses. No obstante, las comerciales hacen unas matizaciones. «Confiamos que el esfuerzo económico que supone para los operadores privados esta cofinanciación sirva para que se vean contenidos de servicio público y no comerciales, ya que sería pervertir el sistema», señaló el portavoz de las televisiones privadas, Jorge del Corral.