LA NOVEDAD era El rondo y su tema, el omnipresente fútbol. La 2 lo estrenó en el night time del domingo, cuando todavía estaban en la ducha los jugadores del último partido de la jornada, en este caso Cádiz-Real Madrid. Colocan a un lado a cuatro invitados famosos relacionados con el balompié. En el contrario, cuatro periodistas especializados y enfrente tres profesionales de TVE a los que se añade el ex-atlético Kiko Narváez. Anunciaban que se trata de discutir, de polemizar y hasta de gritar, casi al estilo de la televisión marrón. Por fortuna, nada hubo de eso, y en principio parece tener las de ganar entre los fútboleros del país, que son mogollón y saben del tema como Ortega Cano de toreo o Plácido Domingo de ópera. Sin casi. De propina, les dejan opinar con SMS. Interesará en función de sus invitados, pero El rondo promete. Dan los resultados, los goles y la tabla. En directo, que está bien y es un riesgo. Pero como en toda primera vez, hubo sus defectos. Más de medio programa lo dedicaron a hablar del Madrid y de Robinho como si la Liga no tuviera veinte equipos. Intentaron arreglarlo sobre la marcha, pero un invitado como periodista, en realidad era un hooligan del Madrid. El tío erre que erre, mientras el tiempo del espacio se consumía. Cosas de un estreno. En principio, El rondo intenta ser algo diferente.