Patrocinado porPatrocinado por

«Xa tiñamos ganas de volver a unha feira do viño»

José Campos, C.C. MONFORTE / LA VOZ

AGRICULTURA

La 41 edición de la Feira do Viño de Amandi iniciada ayer es la primera con público desde el inicio de la pandemia

13 ago 2021 . Actualizado a las 13:24 h.

La Feira do Viño de Amandi celebra su 41 aniversario con la presencia de público, es la primera edición que cuenta con él desde que empezó la pandemia. El acto de inauguración celebrado ayer destacó por la apertura de la feria a manos de la familia de Benito Rivas y el pregón, que este año corrió a cargo de la cantante y compositora Eva Amaral, voz del grupo de música Amaral. La feria se celebra en la plaza del Ayuntamiento, allí se palparon las ganas y entusiasmo del público así como de los organizadores, que asistían a la primera feria con público desde que empezó la pandemia.

Alrededor de las once menos cuarto ya se estaban acabando de ultimar detalles para dar inicio a la Feira do Viño de Amandi. Poco tiempo después, sobre las once y cuarto, llegaba la familia de Benito Rivas Valdés, uno de los fundadores de la feria, que falleció recientemente, para abrir el festejo de manera oficial. Su viuda, Clara Álvarez, fue la que cortó la cepa para dar inicio a la feria de este año, seguida de Ana y María Fernández, sus dos nietas.

Entrada solo con reserva

Poco a poco los asistentes que adquirieron sus entradas previamente al acto, pudieron ir entrando al recinto. No podían pasar en cualquier momento, hay una serie de franjas horarias preestablecidas y que el público debía de elegir al comprar su entrada. En la entrada había un control para asegurar que cada persona iba a su hora y que efectivamente contaba con un tique para acceder, para ello el personal escaneaba cada uno antes de dejar pasar. También hay aforo, ya que para cada pase estaban disponibles 150 entradas.

Al primer pase accedió bastante gente, pero fue poca en comparación con otros años, cuando normalmente el recinto estaba a rebosar de gente. Rubén Moure de Finca Cuarta comenta baque «de momento veu bastante xente, aunque non como outros anos. Pola tarde esperamos que veñan máis». Algo en lo que también coincide Iván Martínez, de Roscas Moncho: «Veu bastante xente, aínda que moita xa encarga as roscas por teléfono. Antes da pandemia viña máis xente».

Mientras los asistentes iban entrando, tuvo lugar una precata sobre las once y media, que fue llevada a cabo por el jurado que evalúa los distintos vinos de las 18 bodegas que hay en la feria. Se celebró en la sala de plenos del Ayuntamiento. Para conocer el ganador del concurso de catas, habrá que esperar hasta mañana, último día de la feria.

Un rato después entró a la plaza la banda de música de Sober e interpretó varias piezas para amenizar la feria. La gente se iba animando con el ambiente, cargado de emoción por la vuelta de la Feira do Viño de Amandi, que en esta edición trae público por primera vez desde que comenzó la pandemia. Así lo demostraban asistentes como Barbara Encinas: «Ya llevamos viniendo varios años y teníamos ganas de volver a la feria del vino, uno de los sitios donde mejor lo pasamos». Otro de ellos era Tomás Feijoo: «Xa tiñamos gañas de volver a unha feira do viño, botábase de menos. Ademais tamén é importante vir e apoiar o comercio local». En la feria también había turistas y recién llegados. Uno de estos era Álex Messianu, un sumiller que se mudó a A Peroxa hace apenas mes y medio: «Cualquier evento en el que pueda catar vinos no me lo pierdo. También vengo para apoyar a las bodegas más pequeñas».

Adaptarse a las circunstancias

Para cerrar el acto de apertura se leyó el pregón sobre las doce del mediodía. La encargada este año fue Amaral. Varios representantes públicos intervinieron previamente. El primero de ellos fue el alcalde de Sober, Luis Guitián, que empezó lamentado la imposibilidad de celebrar la Feira do Viño de Amandi el Domingo de Ramos, como venían haciendo anteriormente, pero finalmente volvían. «Adaptándonos ás circunstacias, aquí estamos un ano máis homenaxeando aos nosos viticultores e viticultoras», dijo el regidor.

Tras él habló el presidente de la Deputación de Lugo y alcalde de Monforte, José Tomé, que destacó la importancia de la Feira do Viño de Amandi para la promoción del enoturismo lucense. «O turismo vinícola é un aliado excelente da promoción do territorio», decía Tomé.

El último en hablar fue el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, que reafirmó el compromiso gobierno gallego con la candidatura de la Ribeira Sacra para convertirse en Patrimonio de la Humananidad. «O noso compromiso continúa intacto e seguimos traballando, con máis forza se cabe ca nestes últimos anos, para protexer e impulsar a Ribeira Sacra», explicó el conselleiro.

Amaral pone en valor la viticultura heroica y a Sober

Tras las intervenciones previas, llegó el pregón de la cantante Eva Amaral, en el que reivindicó el papel de la viticultura. «Es algo más que una tarea: es vocación y devoción», aseguró antes de añadir que no es preciso decirles a los viticultores que son heroicos porque su valor «va más allá de cualquier etiqueta». Otro punto que destacó fue la belleza de Sober, que a Amaral le parece que puede ser «el catalizador de todo lo extraordinario» de este territorio, entre lo que citó: «La brisa perfumada que respiráis al caminar entre fentos y carballos; el sol que os bendice y la bruma que llena de delicado misterio los amaneceres; el agua que lleva el Sil, sagrado corazón de Amandi, hasta sus venas capilares; y los incontables regatos que serpentean en los meses más húmedos».