Antonio López Navas, de la AEMPS: «Hay 30 terapias anticovid que se están probando en humanos»

Gabriela Consuegra
Gabriela Consuegra REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Agencia Española del Medicamento

El organismo se está planteando la retirada de Remdesivir porque los resultados que se están logrando en pacientes no son consistentes

07 ago 2021 . Actualizado a las 10:01 h.

El tratamiento del covid sigue siendo el talón de Aquiles de la ciencia. Antonio López Navas, jefe del servicio de Enfermedades Infecciosas de la Agencia Española del Medicamento responde y actualiza la información sobre los fármacos disponibles y los que están en ensayos clínicos.

-¿Por qué ha sido tan complejo encontrar un tratamiento?

-Cuando hablamos de encontrar un medicamento eficaz para infecciones víricas tenemos que entender que, en general, la ciencia aún no ha sido capaz de contar con ninguno, a excepción del de la hepatitis C. En el caso del SARS-CoV-2, la enfermedad que produce es muy compleja, multifactorial, no la conocemos del todo. De ahí que no se hayan descubierto antivirales completamente eficaces. Pero hay un esfuerzo científico sin precedentes a nivel mundial. El hecho de que por el momento no se hayan obtenido resultados satisfactorios no puede considerarse un fracaso.

-Los medicamentos disponibles funcionan en etapas tempranas. ¿Es más complicado encontrar fármacos para fases avanzadas?

-Una vez el virus entra en contacto con el organismo, hay una fase inicial, aproximadamente de 7 a 10 días, en la que se multiplica en las células. Es en esta etapa donde debemos controlar la replicación con antivirales o con anticuerpos monoclonales. Es crucial que se administren lo más pronto posible para evitar llegar a la segunda fase inflamatoria. Sobre esta, todavía no está claro cómo se produce, aunque sí se han identificado factores de riesgo. En todo caso, la multiplicidad de vías por las que se activa el sistema inmune hace difícil encontrar un fármaco totalmente eficaz para esa parte de la infección. Intervenir una de las vías no garantiza que se bloquee el proceso inflamatorio.

-¿Y qué limitaciones tienen los medicamentos que han aprobado?

-Hasta la fecha, únicamente la dexametasona (un corticoesteroide) y el Remdesivir (un antiviral) se han aprobado. Sin embargo, el Remdesivir ha pasado por distintas fases, con resultados en los ensayos clínicos que no son consistentes y que nos obligan a reconsiderar su lugar en el tratamiento.

-¿Se está desarrollando algún ensayo clínico que trate las formas graves de la infección?

-En estos momentos, hay más de 200 terapias en investigación en todo el mundo. Alrededor de 30 están ya probándose en seres humanos. Varios fármacos se están evaluando también en las formas graves. Aquellos que están en las últimas fases de investigación, muestran que una administración precoz junto al tratamiento estándar actual, especialmente en los pacientes con peor pronóstico, reduce el número de muertes y la progresión a una insuficiencia respiratoria grave. Hay que tener en cuenta que la mayoría se deben utilizar en el ámbito hospitalario. Por tanto, necesitamos tratamientos que se puedan administrar de forma ambulatoria en los primeros días y también de forma profiláctica a los contactos estrechos, impidiendo así la propagación del virus.

-Las vacunas han sido una herramienta insustituible, pero ¿se podrá dar fin a la pandemia sin que exista un tratamiento?

-Para poder ponerle fin solo con las vacunas tenemos que alcanzar unas tasas de inmunización realmente altas a nivel mundial. Es posible que, a corto plazo, únicamente logremos controlar la pandemia. Pero no erradicarla. Eso hace necesario contar con tratamientos eficaces.

«El virus siempre puede mutar»

Antonio López Navas, jefe del servicio de Enfermedades Infecciosas de la Agencia Española del Medicamento, explica que encontrar una terapia anticovid será vital, especialmente para los pacientes que, por uno u otro motivo, no desarrollen la inmunidad a través de la vacuna. Este perfil, por pura estadística, comenzará a aumentar en los hospitales. Sin embargo, el experto insiste en los beneficios de la vacunación.

-¿Por qué mientras no exista un tratamiento solo la vacuna nos permitirá controlar la pandemia?

-Es importante tener en cuenta que, más allá del porcentaje que no tenga una respuesta inmunitaria eficaz, las vacunas permiten reducir las complicaciones y la mortalidad en la mayoría de los pacientes que se infecten. Y en la medida en la que consigamos mayor inmunización, la necesidad de tratamientos será menor.

-Pero entonces, una acción global será necesaria

-Sí. Es muy importante recordar que mientras el virus permanezca en circulación, siempre existe la posibilidad de una mutación para la cual algunas vacunas actuales pueden no ser efectivas. Por eso, uno de los pilares de la Estrategia Europea de vacunas es la solidaridad, porque mientras no estemos todos protegidos, ninguno lo estará.