Filmar Lugo para dejar un documento

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LA VOZ

SOCIEDAD

Carlos Méndez y Alfonso Díez, grabando con dron junto al puente romano
Carlos Méndez y Alfonso Díez, grabando con dron junto al puente romano OSCAR CELA

La productora ADVM graba este puente de mayo el confinamiento de la ciudad

04 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

A Alfonso Díez la crisis del coronavirus le cogió en el peor momento. Acababa de crear unas semanas antes una productora, Audiovisual Media (ADVM), y el estado de alarma se llevó por delante la opción de tener os primeros pedidos y encargos. Pero como a los malos momentos hay que intentar poner buena cara, el y su equipo decidieron aprovechar este parón para, primero, formarse mejor y ensayar más con los equipos de rodaje, y por otra parte, se propusieron filmar un pequeño cortometraje con el que dejar huella o documento para el futuro sobre cómo fue y cómo se vivió el confinamiento en la ciudad de Lugo.

Presentaron la propuesta al Concello, que les animó, y tras conseguir los permisos necesarios para el rodaje, desde el pasado jueves y hasta hoy grabaron la paralización de la ciudad y, a la vez, los primeros pasos de desescalada que se comenzaron a vivirse ayer en las calles. «Este largo fin de semana es perfecto, porque nos permite tener el Lugo del confinamiento y el Lugo de los primeros pasos para un nuevo despertar», explica Alfonso Díez, director y guionista del documental.

En el rodaje participa el cámara Carlos Méndez, que además se encarga del uso del dron. La voz del documental será de la dobladora Sara Iglesias Areán. La pieza durará poco más de cinco minutos, aunque la grabación contará con numerosas horas que tendrán que pasar por el montaje.

Carlos Méndez y Alfonso Díez, grabando con dron junto al puente romano
Carlos Méndez y Alfonso Díez, grabando con dron junto al puente romano OSCAR CELA

«Queremos jugar con ideas como el paso del tiempo tranquilo y relajado, con técnicas como el time-lapser (que permite aumentar el tiempo de grabación con menos imágenes cada segundo) y las últimas técnicas que hay de rodaje, con zums especiales», explica Alfonso Díez. Se trata de plasmar todo lo contrario de cómo es la vida diaria, más ajetreada y con el paso de turismos y peatones a cámara rápida, para convertir a Lugo es un remanso de paz y donde apenas se mueven unas hojas. Pero eso sí, con el contrate, apuntan, del arranque de la desescalada, un poco de esperanza para el futuro.

A nivel narrativo jugarán con el concepto de la Muralla y la metáfora de la defensa: «Los lucenses y el monumento romano han resistido durante siglos, e igual que entonces, ahora los lucenses han sabido resistir sin salir del confinamiento».

Explican que Lugo ha sido un ejemplo en España de cómo la ciudadanía ha sabido responder al estado de alarma, «tal y como se puede comprobar por los datos de contagio», con lo que esperan que el documental sirva como documento gráfico de cómo los lucenses han sabido ser responsables ante una situación tan extrema.

Dos equipos

El equipo de rodaje estuvo por diferentes zona de la ciudad, divididos en dos grupos. Por un lado se rodaron escenas con el dron y por otro planos fijos o incluso en movimiento, como el uso del coche dando un paseo por la ciudad, como ocurrió en la tarde del viernes, cuando apenas había movimiento en las calles de Lugo. También, como no podía ser de otra manera, grabaron los aplausos que los vecinos realizan todos los días a las ocho de la tarde desde sus ventanas en homenaje al trabajo de los sanitarios.

Cuando tengan todo el montaje terminado realizarán una presentación al público y seguramente lo subirán a Internet. Alfonso Díez insiste en que el objetivo para realizar este documental es dejar para el futuro, como un archivo, una muestra de cómo vivió Lugo unos meses tan especiales en su historia: «Hemos vivido y estamos viviendo un hecho histórico y mundial, y es bueno que se refleje el confinamiento de Lugo y el agradecimiento no solo a los sanitarios si no también al comportamiento de los lucenses».