Llevo tres años en libertad con cargos», asegura el fotoperiodista independiente ourensano Pedro Armestre, que en el último año ganó los premios Rey de España y Ortega y Gasset. Explica que se enfrenta a los mismos cargos que los dieciséis activistas «solo por cubrir la noticia y hacer mi trabajo». El incidente le costó que no lo autorizasen para cubrir la pasada coronación del nuevo rey.
-¿Por qué está encausado?
-No lo sé. A mi nadie me preguntó nada sobre qué estaba haciendo allí. Vino un guardia, me dice que estoy detenido, me esposan y me llevan al calabozo, donde paso 40 horas. Luego me llevan ante el juez, que me pregunta si le había rajado la barriga a un vigilante de seguridad con una radial, el mismo vigilante que cambió su declaración porque antes había dicho que había sido él quien se había hecho daño con una serpentina. Hay otro con lesiones porque le mordió un perro, pero allí nadie de Greenpeace llevó perros.
-Lo acusan de daños, lesiones y desorden público.
-¿Daños?, no sé cómo los podía hacer porque tenía la cámara en mis manos. Y las lesiones no entran en mi filosofía de vida. Ni en la mía ni en la de Greenpeace, que es una oenegé pacifista.
-¿Está tranquilo ante el juicio?
-Yo tengo muy claro que no he hecho nada fuera de la ley, solo he cumplido con mi trabajo en una cobertura informativa en la que no he hecho nada fuera de lo habitual con respecto a otras. Estoy tranquilo, aunque algo de preocupación sí que tienes.
-¿Volvería a hacer lo mismo?
-Voy a seguir ejerciendo mi trabajo como hasta ahora, porque no he hecho ningún mal.