Décimo Junio Bruto venció al olvido

SOCIEDAD

La Festa do Esquecemento concluyó con la batalla final entre los romanos y los límicos

20 ago 2012 . Actualizado a las 12:01 h.

El río Lethes, hoy río Limia, conocido por las cualidades de sus aguas, fue ayer el punto de encuentro. Seguramente su caudal en el año 135 antes de Cristo -momento en que se suceden los hechos recreados- no era el mismo, ni tampoco su leyenda. Las tropas de Décimo Junio Bruto hace horas que campan por Xinzo. Casi a sus anchas. Ayer fue el gran día. El momento en el que Décimo Junio Bruto demostró a su ejército que eso de las aguas del olvido no era más que una leyenda y que su avance de conquistador no podía quedar en esas tierras.

Seis de la tarde. Orillas del Lethes. El ejército romano para en seco. Se niega a atravesar unas aguas de las que se dice que borran la memoria, que todo aquel que las atraviese perderá su identidad y su patria. Los habitantes de esas tierras, los límicos, observa desde la otra orilla: «No pasarán». Pero no es así. Décimo Bruto coge el estandarte de las tropas romanas y atraviesa el río. Desde la otra orilla va enumerando a su ejército. Nombre por nombre. Y las tropas romanas cruzan el Lethes.

Ayer lo hicieron ante la atenta mirada de decenas de curiosos, vecinos y visitantes que, aunque conozcan la historia, parecen desear otro final. La actividad se desplaza tierra adentro y se inicia la batalla entre las tropas romanas y los castrexos. Con música de fondo -inexistente seguramente en tiempos de Bruto pero que en estos confiere a las batallas mayor realismo-, el enfrentamiento da paso al avance de las tropas romanas. Eso sí, la recreación permitió que antes de dejar Xinzo desfilaran junto a los castrexos por las calles de la villa.