La jerarquía eclesial ?se reúne hoy y mañana para renovar todos sus cargos, a excepción del de portavoz
03 mar 2008 . Actualizado a las 02:00 h.Rouco frente a Blázquez. La celebración de la 91.ª reunión de la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española (CEE), que se inicia hoy, será una de las más cruciales de la última década. Mañana se conocerá el nombre del nuevo presidente y cabeza visible de la Iglesia para los próximos tres años, cinco días antes de saber si el PSOE gobierna en una nueva legislatura o si, por el contrario, el Partido Popular toma los mandos del país.
Los indicios apuntan a Rouco como favorito para recuperar las riendas de la cúpula eclesiástica. Sin embargo, el nombre de Blázquez aparece como idóneo si el PSOE revalida el poder, ya que permitiría reencauzar mejor los enfrentamientos mantenidos con el Gobierno de Zapatero durante los últimos tres años.
Sobre el papel, la figura del cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, aparece como la que goza de un mayor número de apoyos entre los 78 prelados que intervendrán en las votaciones secretas, ya que en el último trienio la mayoría de los nombramientos de obispos han estado más cercanos a su tendencia. No obstante, los comicios de la jerarquía eclesiástica pueden deparar sorpresas y provocar que, de modo inopinado, la figura de Blázquez vuelva a emerger cuando menos se espere y consiga la reelección como presidente del episcopado.
Durante las últimas semanas, las quinielas de posibles aspirante han incluido como probables candidatos a Carlos Osoro Sierra, arzobispo de Oviedo y miembro del Comité Ejecutivo y de la Comisión Permanente de la CEE, cercano a Rouco y posible tapado de este si finalmente, por razones personales, no optara por dar el paso definitivo para asumir la presidencia.
Sin candidatos oficiales
Además del presidente, se renuevan todos los cargos de la jerarquía, a excepción del de portavoz y secretario general de la Conferencia Episcopal, que desempeña Juan Antonio Martínez Camino, obispo auxiliar de Madrid, y cuyo mandato abarca cinco años, que concluye en noviembre de este año. La plenaria designará, además de presidente y vicepresidente, a los miembros del comité ejecutivo y a los titulares de las comisiones episcopales, los ministerios de la Iglesia.
Nadie se postula
En estas elecciones nadie se postula, no hay listas ni candidatos, si bien los diferentes sectores de la plenaria renuevan los organismos episcopales con discreción y apelaciones al Espíritu Santo y a la comunión eclesial. Como en cualquier grupo humano, existen tendencias y sensibilidades dispares.
Rouco ya desempeñó el liderazgo de la Iglesia durante dos trienios consecutivos (1999-2005). En las últimas elecciones, para revalidar su tercer mandato, necesitaba los dos tercios de los votos y quedó a falta de uno.
En una votación posterior, contra todo pronóstico, Blázquez fue elegido presidente por 40 votos frente a los 37 cosechados por el entonces arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, si bien para alzarse a la cúpula de la jerarquía católica solo necesitaba mayoría absoluta (la mitad de los votos más uno).
En esta ocasión, tanto Rouco como Blázquez parten en igualdad de condiciones. Ganará la lid quien logre obtener mayoría absoluta.