La que nos espera

La Voz

SOCIEDAD

02 ene 2002 . Actualizado a las 06:00 h.

Vaya corona, ¡eh! Así nos tendrían que tratar a algunas. ¿Les gusta la pieza? No creo que se aprecie demasiado bien, pero si les va gustando lo que ven les puedo decir el precio: 20,1 millones de pesetas. O lo que es lo mismo, 121.000 euros. No vayan a decir que es caro porque la semana pasada costaba 242.000 euros; o sea, 40,2 millones de pesetas. ¡Vaya lío! La que nos espera con las rebajas. Con el precio de antes, el de ahora, en euros, en pesetas, los cálculos, los redondeos, los decimales... Me temo que mi flamante eurocalculadora se me va a quedar pegada a la mano. Eso si no la fundo antes. Claro que Victoria Beckham no tiene ese problema. Como los ingleses pasan del euro, pues eso que se ahorran en comeduras de cabeza. Además Vicky (¿no la ven un poco desmejorada?) se limita a ser coronada durante unos segundos por Mohamed Al Fayed para iniciar las popularísimas rebajas de Harrod?s, en Londres, que cuaqndo una es una ex-spice, casada con un futbolista de éxito, no se va a las rebajas a otra cosa que nose aganar más dinero. En fin, que los que vienen serán días duros en los que no sólo tendremos que hacer gimnasia física para apartar a los competidores a codazos, sino también gimnasia mental. Que no nos pase ná.

HERIDOS EN TOKYO. Claro que no todas las rebajas son iguales, aunque el momento codazo sí parece común a todo el mundo consumista. En Japón, los grandes almacenes han popularizado un sistema de rebajas sorpresa, que además no son rebajas. Se trata de algo que ellos llaman bolsas de la suerte y que viene a ser como el sobre sorpresa de las ferias. Por unas 15.000 pesetas ó 90 euros ó 75 dólares ó 10.000 yenes, se hace una con la bolsa de la suerte y dentro puede haber algo de más o de menos precio. Yo creo que lo normal es que el contenido sea menor al coste, pero en no pocos casos se puede conseguir una auténtica ganga. El caso es que a los japoneses les subyuga el sistema y el día de Año Nuevo, en el que inician este curioso juego, hubo media docena de heridos graves, casi todos empleados de grandes almacenes atropellados por la multitud. Así que ya ven como las gastan los japoneses.

MILITARES GAYS. Poco a poco, la desengrasada maquinaria de la tolerancia mundial se mueve. Muy poco a poco, eso sí. La última vuelta la van a dar en Brasil, donde están preparando una ley para que ser militar y ser homosexual no constituya delito. Casi parece un chiste pero es así. Una inclinación sexual no mayoritaria combinada con según que profesión se convierte en un delito. Bueno, pues en Brasil, dentro de poco, no. Ya saben, pasito a pasito.