Mila Castro dice que desconocía la existencia de cualquier vínculo entre el exedil Pichel y Desproi
SANTIAGO

La ahora concejala no adscrita declaró ayer en el caso del alquiler de una nave para alojar en el 2021 las áreas de Parques y Rural
22 may 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La ahora concejala no adscrita y responsable de Parques e Xardíns con el último gobierno socialista, Mila Castro, declaró ayer en calidad de testigo en el caso Desproi. Lo hizo en el Juzgado de Instrucción número 1 de Santiago, donde se siguen las diligencias por la contratación directa por parte del Ayuntamiento del alquiler de espacio en una nave de Costa Vella en el 2021 para alojar provisionalmente las dependencias de esa concejalía y la de Medio Rural, hasta entonces localizadas en la vieja estación de autobuses, que tuvieron que abandonar ante su anunciado derribo.
Al frente de la concejalía de Medio Rural estaba entonces José Manuel Pichel, quien había estado vinculado al menos hasta el 2019 con la sociedad mercantil Desproi, con la que el Concello contrató dicho alquiler por decisión de la junta de gobierno en una sesión en la que participó Pichel.
El caso llegó a los tribunales a raíz de una denuncia del PP, a la que acabó sumándose el Ayuntamiento después de que el año pasado se llamase a declarar, también en calidad de testigos, al secretario e interventor municipales. El PP había pedido la comparecencia de los otros cinco ediles participantes en aquella junta de gobierno, entre ellos el exalcalde Xosé Sánchez Bugallo. Y Mila Castro es la segunda que declara —tras el propio Pichel, que dimitió días después de que se conociese su relación con Desproi, en enero del 2023—, aunque lo hizo después de que lo haya pedido el propio Ayuntamiento, ya fuese en calidad de investigada o de testigo. Finalmente, la jueza la llamó como testigo. Con ella, llamó también a un técnico del departamento de Parques.
La ahora concejala no adscrita evitó hacer declaraciones a la salida del juzgado, al que llegó acompañada de los también ediles no adscritos Gonzalo Muíños y Mercedes Rosón. Tampoco quiso comentar el hecho de que el Ayuntamiento hubiese pedido su comparecencia judicial, en la que Castro dijo desconocer que Pichel tuviese algún vínculo con la propiedad de la nave. También dijo desconocer por qué el contrato de ese alquiler (inicialmente previsto por cuatro meses prorrogables, mientras no se adaptasen las dependencias de Amio que debía acoger ambas concejalías, según su propia propuesta) se hizo finalmente por un año prorrogable.