La recogida de basura en el casco histórico de Santiago enfrenta a vecinos y hosteleros

Margarita Mosteiro Miguel
Marga Mosteiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

PACO RODRÍGUEZ

El sector ve correcto, en general, el nuevo sistema, y los residentes reclaman cambios

17 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El funcionamiento del nuevo sistema de recogida de basura en el casco histórico es malo para los vecinos y bastante bueno para los hosteleros, aunque estos últimos reconocen que hay margen de mejora. Fuentes de la Asociación de Veciños Fonseca del casco histórico aseguran que el gran problema de la recogida de basura en la zona vieja es que las islas de quinta y pon «no tienen capacidad suficiente y, pese a que los hosteleros tienen servicio a puerta a puerta, depositan sus residuos en las islas sin dejar espacio para los vecinos».

Los residentes añaden que con frecuencia se llenan con cartones los espacios para restos, por lo que «al llegar el vecino deja su basura donde puede. En las casas se hace la separación, pero en el contenedor no puedes dejar la bolsa donde corresponde». También consideran que el Concello tiene que adoptar medidas en relación con los contenedores fijos, «porque los hosteleros usan estos espacios para no tener la basura en sus establecimientos hasta la noche», a la espera de los camiones del puerta a puerta. Aseguran que, muchas veces, a las doce del mediodía, los contenedores en la Travesa de Fonseca están llenos.

Desde el punto de vista de los vecinos, el sistema debería ser reorganizado, especialmente en relación a los horarios. Critican que en invierno, con lluvia y noche cerrada, los residentes tengan que recorrer toda una calle para ir hasta las plazas a dejar la basura. También reclaman que el servicio de puerta a puerta se extienda las casas, porque ven absurdo que el vecino de un inmueble con un establecimiento de hostelería en el bajo tenga que llevar la basura al contenedor pese a que varios camiones pasarán recogiendo los diferentes tipos de residuos por el local.

Mientras los vecinos se quejan por el funcionamiento del sistema de recogida, los hosteleros consideran que, aunque podrían hacerse «algunos ajustes», en general el funcionamiento es correcto. Thor Rodríguez, de Hostelería Compostela, apuntó que el sector está más conforme con la recogida del orgánico y restos después del cierre del local, y reconoció que hay que subir el porcentaje de participación del colectivo: «Los hosteleros tienen que implicarse más en la separación de los orgánicos». Considera que en el caso del vidrio, envases y cartón, los porcentajes de separación son altos, el de orgánica aún «es mejorable, pero puede ser porque es la novedad y hay que dar un margen para adaptarse». Una de las cuestiones que no satisface al colectivo son los olores que hay que soportar, especialmente, en días de calor cerca de las islas subterráneas y contenedores fijos.

Mejorable en orgánicos

Por su parte, el concejal Suso Domínguez, coincide con el portavoz de los hosteleros en que es mejorable el dato de estos profesionales implicados en la recogida de orgánicos. Dijo que, aunque hay muchos establecimientos que ya tienen los cinco contenedores, aún hay un grupo que no está implicado.

Ante las excusas de parte del sector que alega falta de espacio para tener los contenedores, Domínguez señala que los establecimientos tienen que adaptarse, y no descartó la posibilidad de ajustar el sistema introduciendo una segunda recogida después de las comidas, lo que permitiría reducir la basura que queda almacenada hasta su retirada por la noche.

Explicó Domínguez que hay hosteleros que tienen almacenes alquilados, separados de los establecimientos, donde guardan la basura hasta la hora de la recogida tras el cierre del local. Sugirió que esta puede ser una opción a adoptar entre varios hosteleros. El edil indicó que la recogida de orgánicos aún tiene margen de incremento, y añadió que se trabajará para sumar al sistema a otros establecimientos como las fruterías y supermercados de diferentes dimensiones, que por ahora tiran estos residuos en el contenedor de restos.

Esta semana se analizará el funcionamiento con el informe que pidió el Concello

El pasado mes de junio, el concejal Suso Domínguez encargó un informe del funcionamiento del sistema de recogida (islas de quita y pon y puerta a puerta en hostelería y comercio), con el fin de tener «todos os datos para detectar os posibles desaxustes», explica el edil. Esta misma semana, el responsable de Medio Ambiente se reunirá con el sector de la hostelería para analizar este informe y recoger las apreciaciones del sector. El estudio abarca el período de verano hasta los primeros días de septiembre.

El concejal adelantó que, entre las cuestiones a mejorar según los resultados del estudio, está el funcionamiento de los contenedores de Fonseca, donde es «raro o día que non hai algún cartón pregado ou fóra dos contedores». También debe incidirse en el correcto uso de las islas de quita y pon, donde con frecuencia se mezclan los residuos. El lado positivo es que las recogidas de vidrio y papel están funcionando «moi ben», pero matizó que, frente al orgánico, «levan tempo facéndose».