«El Código Penal es muy duro con quien menos lo merece»

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Conde-Pumpido, en una imagen de archivo en Santiago
Conde-Pumpido, en una imagen de archivo en Santiago

El ex fiscal general resalta que hurtar 450 euros conlleve cárcel, pero no financiar ilegalmente a un partido con 450.000

21 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Invitado por el Ateneo de Santiago, el magistrado del Tribunal Supremo y ex fiscal general del Estado Cándido Conde-Pumpido (A Coruña, 1949) ofreció una conferencia titulada Justicia y corrupción ¿Qué está fallando?

-El título de su conferencia promete dar respuestas. Dígame, ¿qué está fallando en España en la lucha contra la corrupción?

-Los ciudadanos están muy preocupados por la corrupción y tienen toda la razón. La Justicia está actuando con bastante contundencia, pero creo que hay algunos aspectos que nos fallan.

-¿Cuáles?

-En primer lugar, la lentitud. La Justicia actúa en ocasiones de forma demasiado lenta. El sistema procesal que tenemos y la carencia de medios nos llevan a que los procedimientos se alarguen excesivamente. En segundo lugar, hay una legislación insuficiente y deficiente. Insuficiente porque hay tipos penales que no se han incorporado. Por ejemplo, el delito de enriquecimiento injustificado de los cargos públicos. Es decir, que aquellos que hubiesen obtenido un patrimonio absolutamente desproporcionado a sus ingresos pudiesen ser objeto de persecución sin necesidad de demostrar exactamente de qué cohecho o de qué soborno procede. Esto existe en otros países...

-Pero eso sería invertir la carga de la prueba y que el investigado tuviese que demostrar su inocencia...

-Sí, de alguna manera, pero es que la corrupción es como un tango, que se baila muy juntito y el que paga y el que recibe no tienen interés en que nada se sepa. La legislación es también deficiente porque lo que no puede ser es que 450 euros en un hurto lleve consigo prisión y financiar ilegalmente a un partido político con 450.000 euros no. Creo que ahí hay una desproporción. El Código Penal español, y esta última reforma lo pone de relieve, en ocasiones es muy duro con los que menos lo merecen. Por ejemplo, obtener una prestación de la Seguridad Social es delito desde el primer euro. Por un solo día que alguien prolongue su situación de paro injustificadamente es delito, pero en cambio, defraudar a Hacienda solo es delito desde 120.000 euros. Esa descompensación no está justificada.

cándido conde-pumpido magistrado del tribunal supremo