Nadie quiere ya un GPS

SANTIAGO

Los dispositivos de navegación eran imprescindibles ante cualquier viaje. Pero la venta de estos aparatos ha caído por la mejora de los servicios de mapas de los móviles

19 ago 2011 . Actualizado a las 11:27 h.

Fueron el dispositivo estrella hace varios años, pero ahora están de capa caída. Con teléfonos inteligentes con sistemas de navegación gratuita ya no hay tantos conductores que necesiten un aparato específico que les vaya indicando el trayecto de un viaje. Por no hablar de los sistemas de navegación que ya incluyen muchos vehículos como equipamiento de serie.

TomTom consiguió hace varias temporadas que su marca sonara como nombre propio de estos mapas virtuales que no solo indican la mejor ruta, sino que además ayudan a la conducción avisando de los radares instalados en la carretera, la limitación de velocidad específica, las áreas de servicio o la velocidad que va tomando el automóvil. Y esta firma tecnológica ha visto en sus últimas cifras trimestrales el bajón de un sector que no había hecho más que nacer: la empresa holandesa de navegación consignó unas pérdidas de casi 500 millones de euros entre abril y junio, frente al beneficio de 34 millones que había obtenido en el sexto mes del 2010.

Consciente del cambio que se está produciendo, el propio director de la firma, Harold Goddijin, reconocía el «declive que se está produciendo en el mercado de los dispositivos de navegación personales, en un entorno débil del mercado de la electrónica». Pero este declive parece no afectar al mercado de los teléfonos inteligentes.

Alternativas

Las marcas lo saben y han generado un mercado paralelo de accesorios específicos para adaptar los smartphones al vehículo. La principal rival de TomTom, la estadounidense Garmin, también ha visto cómo sus beneficios se reducían sustancialmente en el último año y ambas empresas se han visto obligadas a buscar nuevas vías de negocio para asegurar su futuro. ¿Y qué pueden hacer? Pues ayudar a otros en un campo en el que son expertos: se están especializando en la venta de servicios de mapas y tráfico en directo para otros dispositivos, además de en la fabricación de aparatos específicos incorporados en los vehículos. Los Renault, Fiat y Mazda llevan incorporados en sus salpicaderos sistemas de navegación TomTom. Y, como era de esperar, esta firma ha incluido sus servicios en aplicaciones específicas para teléfonos inteligentes, diseñados específicamente para las plataformas Android, Apple y Nokia.

TomTom cuenta con el aliciente de ser una de las compañías líderes en servicios de navegación y, aunque instalar el programa en un dispositivo cuesta en torno a los 60 euros, el usuario se asegura que tiene mapas actualizados y de garantía en su teléfono. Eso sí, la empresa holandesa debería buscar otras alternativas, ya que las propias firmas de telefonía están ganando terreno en el mercado de los mapas digitales: Nokia tiene los derechos de los que desarrolla Google y Navteq, mientras que Apple ya está trabajando en sus propios datos y pretende especializarse en la información de tráfico para ofrecer un mayor servicio a sus clientes.

Garmin se está especializando en mercados más exclusivos, como el deportivo o el de la navegación aérea: están desarrollando relojes con sensores GPS pensados para atletas, otros que permiten conectarse a redes marinas para el uso de buceadores y otros que ofrecen controles de vuelo automático y sistemas auxiliares de tráfico aéreo.