. No se puede acusar a la Facultade de Farmacia de barrer para casa. En el certamen de fotografía que convocó entre los actos de celebración de su 150 aniversario, ni el tema que propuso se miraba el ombligo ni el fallo favoreció más allá de los justo a los compostelanos. De los tres premios, uno tenía el carácter especial de destinarse a fotos presentadas por licenciados o alumnos de la propia facultad. Y recayó en Manuel Campos Toimil , por la imagen presentada con el lema Que ben, isto non ardeu . En el apartado de fotografía virtual, al que se presentaron 177 obras y para el que estaba previsto un único galardón, los organizadores acordaron conceder un accésit debido a la apretada votación que se produjo. Y así fue como resultó premiado el compostelano Manuel Pombo Garazo , por una foto que tituló Mans do avó , por la que recibió un obsequio conmemorativo. Los premios se entregaron ayer en un concurrido acto en el salón de grados de Farmacia. Al concurso abierto se presentaron 59 fotografías, de las que el jurado seleccionó las 30 que estuvieron expuestas los meses de mayo y junio y entre las que fueron elegidas las obras ganadoras.
De ese tema, pero centrándose en las relaciones culturales que establecieron en los diferentes países de acogida los gallegos que emigraron a lo largo del pasado siglo, habló ayer en la Facultade de Filología de Barcelona la profesora de Historia de América de la Universidad de Santiago Pilar Cagiao . La conferencia la organizaba el departamento de Filología Gallega y Portuguesa de la UB, con la colaboración de la Secretaría Xeral de Política Lingüística. La profesora Cagiao es especialista en temas de la emigración. Fue directora del Arquivo da Emigración del Consello da Cultura Galega, y entre los libros que ha publicado figuran títulos como Muller e emigración y O exilio galego de 1936 , que coordinó con Xosé Manuel Núñez Seixas y publicado este mismo año.
Que no es precisamente emigrante, sino un cocinero que participa en los segundos Encuentros de Cocina Profesional Murcia Turística, que se celebran desde el lunes próximo hasta el 5 de noviembre, organizadas por el Centro de Cualificación Turística de aquella comunidad. Como no podía ser menos, los ponentes en estas jornadas son destacados jefes de cocina, veinte en total. Y uno es Marcelo Tejedor , alma del restaurante compostelano Casa Marcelo. La presencia gallega se completa con José Solla , bien conocido en Santiago, pero que tiene sus dominios gastronómicos, Casa Solla, en Pontevedra.
Otro compostelano de adopción que tiene mucho que decir en cuestiones musicales es el padre José López Calo . Este musicólogo, catedrático emérito de la Universidad de Santiago, presidió el jurado que le otorgó al compositor turolense Antón García Abril el premio Tomás Luis de Victoria , un galardón que va por su séptima edición y que está considerado como el Premio Cervantes de la música. Dotado con 60.000 euros, esta distinción reconoce la valía de autores vivos en el ámbito hispanoamericano. García Abril fue el elegido por el jurado entre 57 compositores finalistas, procedentes de 17 países de Iberoamérica. La entrega del premio se celebrará el próximo día 18 en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, en un acto que estará presidido por el ministro de Cultura, César Antonio Molina . La laudatio del compositor la hará Esther Sestelo y la sesión se cerrará con el estreno de una obra de García Abril.