El área de Derecho Constitucional del campus ourensano quiso organizar ayer un debate sobre la reciente reforma constitucional al que asistieran candidatos de los tres grandes partidos. PSOE y BNG enviaron a sus cabezas de lista al Congreso -Laura Seara y Xosé Manuel Pérez Bouza, respectivamente- y el PP, a nadie. Los organizadores de la actividad explican que se pusieron en contacto con el número uno de la candidatura popular, Celso Delgado, pero que él no podía asistir ya que ayer tenía reunión de la Diputación Permanente del Congreso. Tenía, por tanto, una excusa más que justificada. Pero es que, cuando los responsables del área de Derecho Constitucional le preguntaron quién podía ir en su lugar, no hubo respuesta. Nadie en la candidatura popular está preparado como Delgado para hablar de un tema tan técnico y el PP prefirió no enviar a ninguno de sus representantes.
Esta circunstancia no pasó desapercibida para socialistas y nacionalistas, que censuraron el plantón del PP. La más dura en este asunto fue Laura Seara, candidata del PSOE, que lamentó «profundamente» la ausencia de algún miembro de la lista en el debate. «As candidaturas non só as conformamos un só. Tiña que haber outras persoas que puideran participar», dijo la socialista, que confesó también su malestar con el hecho de tener que debatir exclusivamente con el BNG. «Hai moitas máis cousas que non unen das que nos separan», señaló.
Reforma constitucional
Sin embargo, el tema que trataron ayer es uno de los que los separan. La reforma constitucional aplicada para contener el déficit de las administraciones públicas fue consensuada por PP y PSOE y el BNG fue uno de sus máximos opositores. Laura Seara admitió que la jornada en la que se aprobó «non foi a máis feliz» de su vida, pero que era necesaria dada la actual situación económica. Pérez Bouza, por su parte, censuró las formas, el fondo y las justificaciones dadas por el Gobierno para aprobarla. La discusión, no obstante, fue distendida.