Así no vamos a ninguna parte

Ignacio Bermúdez de Castro
Ignacio Bermúdez de Castro PASOS SIN HUELLAS

OPINIÓN

27 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La inconsciencia de algunos en ocasiones es de juzgado de guardia, y allí es adonde deberían ir a parar las personas denunciadas por estar sin mascarillas en fiestas dentro de los bares. ¿Cómo es posible tanto incivismo con la situación tan dramática que estamos viviendo? Por no mencionar el caso omiso que hacen de la normativa vigente los propietarios de los locales, por permitir el consumo de bebidas en la barra y un exceso de aforo más que considerable. Por situaciones como estas, por mucho que los negacionistas pongan el grito en el cielo, es por lo que acabamos metidos de lleno en una segunda ola del maldito coronavirus. Con independencia de que con estos comportamientos se está vulnerando medio Código Penal, los jóvenes, y no tan jóvenes, que acuden a estas fiestas no solo se arriesgan a contagiarse ellos sino que llevan el virus a sus casas, en las cuales en muchos casos conviven con padres y abuelos, a sus trabajos, aulas y demás lugares en los cuales van a exponer a gran cantidad de personas. Soy un firme defensor de la juventud. En general en el confinamiento su comportamiento fue ejemplar. Pero una vez que se produjo la relajación, con el fin del estado de alarma, algunos se dejaron llevar por los cantos de sirenas de las fiestas no disfrutadas y volvieron determinados botellones y concentraciones de muchachos sin la siempre incomoda, pero imprescindible, mascarilla. Me niego a aceptar aquello que decían de que «la juventud es la única enfermedad que se cura con el tiempo».