Estrellas

La Voz

OPINIÓN

CÉSAR CASAL GONZÁLEZ

04 may 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

FERNANDO Alonso, Rafa Nadal y Pau Gasol son hijos de la abundancia. Altos, sanos y fuertes, rompen la típica imagen del deportista español como flor de un día, con tendencia a marchitarse. Las estrellas españoles del deporte triunfan de vez en cuando, si triunfan. Siempre faltó carácter. El clásico derrotismo español, supongo. El crack termina por hacer crack. El que mejor representa a ese líder quebradizo, experto en el Guadiana, aparecer y desaparecer, es Raúlito, el delantero sin punta de los merengues. Marcó aquel golazo de videoconsola, de número uno, en la Intercontinental en Tokio y ha terminado por merecerse como mucho un balón de chocolate en vez del de oro. Desaparecido, le canta Manu Chao. Ahora sale en las revistas del corazón. El deportista español siempre ha triunfado muy bien en la prensa rosa, desde Santana. Así no hay forma. Ahora tenemos a esos tres jóvenes, Alonso, Nadal y Gasol, que ganan sí o sí, que no piden perdón por ser buenos. Tienen hambre de éxito. No lagrimean cuando las competiciones se tuercen. Si no los malea Belén Esteban, Crónicas y el color del dinero, los tres cambiarán al fin la imagen llorona e inconstante de las estrellas del deporte patrio. cesar.casal@lavoz.es