Con una brillante trayectoria dentro del Grupo Mercedes, el diseñador alemán Gorden Wagener ha sido el responsable de modelar el llamativo «hypercar» en el que el fabricante incorpora el arsenal tecnológico desarrollado desde su triunfal regreso a la Fórmula 1.
17 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El pasado 23 de septiembre, el Mercedes-AMG One revalidaba su título como el automóvil de serie más rápido en cubrir el trazado del circuito de Nürburgring, rebajando la marca que ya en el 2022 le había valido semejante distinción, a la que suma también el récord de vuelta rápida establecido en el circuito de Monza en abril del 2023.
Aunque se trate estrictamente de un modelo de serie, sus resultados en los circuitos recuerdan su ADN de competición, con la aplicación de soluciones desarrolladas para Fórmula 1, incluyendo la unidad de potencia con la que Mercedes alcanzaba el triunfo en esta competición en el 2015. Al V6 turbo de 1.6 litros se suma la asistencia de cuatro motores eléctricos que le proporcionan tracción integral y una potencia total de 1.063 CV, con estructura y carrocería de fibra de carbono y un despliegue de equipamiento tecnológico capaz de optimizar variables aerodinámicas, suspensión y potencia.
En su exterior destaca precisamente la abundante utilización de recursos aerodinámicos; desde el alerón trasero activo y la aleta de tiburón hasta los llamativos flaps móviles sobre las aletas delanteras, además de la característica toma de aire para el motor sobre el techo.
El responsable de combinar todos estos elementos, incorporar unas puertas diédricas y lograr la poderosa imagen del One ha sido un diseñador con una amplia trayectoria en la empresa, y que desde 2016 ocupa la dirección de diseño de Mercedes-Benz Group AG: Gorden Wagener.
Nacido en Essen en 1968, Wagener mostrará desde la infancia interés por el arte y el diseño, y dotes para el dibujo, lo que le llevará a cursar estudios de Diseño Industrial en la universidad de su ciudad natal entre 1990 y 1993, para trasladarse después al Royal College of Art de Londres, donde se especializará en Diseño de Transporte. En 1995 comenzará su carrera profesional trabajando para Opel como diseñador de exteriores, de donde pasará primero a Mazda y después a Volkswagen, hasta incorporarse finalmente en 1997 al departamento de Diseño con el que Mercedes contaba en su planta de Sildenfingen, en las afueras de Stuttgart.
En su trayectoria dentro del grupo irá alcanzando rápidamente puestos de mayor responsabilidad, que supondrán también cambios de localización. En 1999 es nombrado director de diseño interior y exterior del estudio de Sildenfingen, en el 2000 se desplaza al Centro de Diseño de Tokio y en 2006 se traslada a otro de los centros de diseño avanzado del grupo, en California, donde además de su experiencia profesional surgirá su declarada afición al surf. Tras la jubilación en 2008 de Peter Pfeiffer, que después de cuatro décadas en la empresa ocupaba entonces la dirección de la División de Diseño, Wagener pasará de responsable del departamento de Diseño Avanzado, que englobaba los estudios de California y Japón, a ser designado para ocupar aquel puesto, sin haber cumplido los 40 años.
El mismo año 2008, Wagener establecerá la que en adelante sería la filosofía de diseño de Mercedes-Benz, bajo la denominación de Pureza Sensual (Sensual Purity), y su trabajo se extenderá desde entonces también al conjunto de marcas del grupo: Mercedes-AMG, Maybach, Smart, vehículos comerciales y los camiones Actros y Freightliner. En el 2016 es nombrado responsable de diseño del grupo, con rango de vicepresidente ejecutivo, pasando a formar parte del consejo de administración.
Además del diseño de modelos de producción y concepts, su responsabilidad incluye también la identidad de marca y los concesionarios, y a través de MB Style ha participado además en el desarrollo de mobiliario, lanchas y yates, o incluso el interior del helicóptero Eurocopter EC145. Su trabajo ha sido reconocido con el nombramiento como profesor honoris causa por la Universidad de Arte y Diseño Moholy-Nagy de Budapest (2009), la concesión de un doctorado honorífico por la Universidad Técnica de Sofía (2010) y el American Prize of Design.