«La sostenibilidad es un imperativo moral»

Gladys Vázquez REDACCIÓN / LA VOZ

MERCADOS

cedida

La firma de ropa de trabajo Obrerol ha colaborado en un proyecto de reforestación de un área afectada por un incendio en Outeiro do Catadoiro, en Caldas de Reis

28 abr 2024 . Actualizado a las 10:56 h.

Se definen como una compañía comprometida con la sostenibilidad. Además, deciden probarlo con acciones que tengan un impacto directo en el entorno y en los ciudadanos. Una de sus últimas experiencias ha tenido además a Galicia como escenario.

La firma asturiana Obrerol, referente en el diseño, fabricación y comercialización de vestuario laboral, ha compensado más de cincuenta toneladas de CO2 colaborando en el proyecto de reforestación de Outeiro de Catadoiro, en Caldas de Reis, un área asolada por el fuego en el 2017. «Reconocemos la importancia de asumir la responsabilidad de nuestras emisiones de carbono y tomar medidas concretas que contrarresten este impacto. Nos asociamos con la plataforma Dcycle para medir nuestra huella de carbono y encontrar formas efectivas que nos permitiera compensar nuestras emisiones», aseguran desde Obrerol. Así fue cómo llegaron al proyecto Galicia Rexenera.

Desde Dcycle se les proporcionó información sobre el proyecto y, tras su evaluación, esta firma asturiana decidió intervenir. «Este lugar se encuentra en una región que ha experimentado una deforestación significativa debido a la actividad humana y a los desastres naturales», dicen.

Así, desde Gijón, se pusieron en marcha con el objetivo de ayudar a restaurar el ecosistema local y a proteger la diversidad. «Nos enorgullece asociarnos con este tipo de iniciativas y estamos comprometidos a seguir buscando formas de minimizar nuestro impacto ambiental con el objetivo de promover un futuro más sostenible».

Ahora dan por compensada su huella de carbono del 2023 con esta inversión y han conseguido el Certificado de Neutralidad Climática, pero su siguiente paso es implicarse «de forma activa con el proceso».

Con esta acción y este proyecto, impulsado por la Asociación Forestal de Galicia, refuerzan un compromiso que dicen tener en su ADN. «La industria textil nos ha enseñado que la sostenibilidad es más que una opción, se trata de un imperativo moral y empresarial. Como empresa familiar arraigada en valores de integridad y responsabilidad, estamos comprometidos a liderar el camino hacia un futuro donde la producción textil es sinónimo de moda y comodidad, pero también de prácticas éticas y sostenibles», dicen desde esta empresa de una treintena de trabajadores, 1.500 clientes distribuidos por España, Francia, Portugal e Italia, y con una facturación de más de tres millones de euros al año.

COMPROMISO

«Nuestro objetivo es ser líderes en sostenibilidad como una empresa textil y como agente de cambio positivo en una industria y en la sociedad en general». Y es que la producción de ropa se enfrenta a uno de sus retos más importantes, reducir su contaminación. «Nos basamos en un enfoque holístico, integrando la sostenibilidad en todas las áreas de nuestra empresa, desde la adquisición de materias primas hasta la distribución de nuestros productos». Además, colaboran con otras empresas, oenegés, instituciones académicas o proyectos gubernamentales. «Estamos orgullosos de haber aplicado las tres ‘r' del reciclaje: reducir, reutilizar y reciclar, que nos ha permitido tener un packaging 100 % ecoeficiente y de la eliminación de todo plástico de un solo uso». Han desarrollado además nuevas técnicas de doblado para reducir espacio y optimizarlo en torno a un 30 % y así mejorar el transporte de mercancías. «En el 2020, decidimos transformar el packaging de un solo uso en una caja de cartón que permite ser reutilizada. De los residuos generados en otros procesos productivos, obtenemos las materias primas que usamos en nuestras bolsas, Monza, que son de poliéster 100 % reciclado o de material biodegradable y compostable, elaboradas a partir de almidón de maíz u otras plantas», explica el equipo.