Un párroco de la Terra Chá propone a los fieles que no se den la mano en las celebraciones
05 mar 2020 . Actualizado a las 12:51 h.Si toda precaución es poca, hay que mantenerla incluso cuando se va a misa. Así lo entiende un párroco de la Terra Chá, Luis Rodríguez Patiño, que ha decidido proponer a los feligreses que no se den la mano en el oficio litúrgico como forma de evitar contagios. Patiño, párroco en Xermade y en Guitiriz así como en los vecinos municipios de Aranga y de Monfero, sugiere como alternativa que los fieles se dirijan una mirada, muevan el brazo o se lancen un beso imaginario. Las medidas, que se explicarán en las misas de este próximo domingo, no se detienen ahí y se extenderán también al Viernes Santo: el cura cree que se debe renunciar a besar la cruz porque así se reduce el riesgo de contagio. Aunque admite que solo se trata de recomendaciones y que los feligreses tendrán la última palabra, dejará de estrechar la mano, como señal de la paz, a los que en misa se sientan en el presbiterio o en los bancos de las primeras filas.
A la espera de saber cómo evoluciona el riesgo de contagio, Patiño, cuyos puntos de vista a menudo discrepan abiertamente de los de la jerarquía, recuperará la costumbre de lavarse las manos en el ofertorio de la misa, y advierte que en las primeras comuniones, que pronto empezarán a celebrarse, también deben mantenerse esas precauciones.