La transcantábrica está operativa para el paso de vehículos desde las tres y cuarto de la tarde
10 jun 2015 . Actualizado a las 17:25 h.El tramo negro de la A-8, comprendido entre Arroxo (Lourenzá) y A Xesta (Abadín), se ha reabierto esta tarde tras un corte de más de 90 horas. Llevaba cerrado desde aproximadamente las diez y media de la mañana del sábado, momento en que se cortó por una densa niebla que se mantuvo en días siguientes. El corte ha sido el más largo de los padecidos en el último año, desde que un grave accidente ocurrido en un día de julio con escasísima visibilidad impuso la decisión de cerrar el tramo cuando la niebla era intensa.
La falta de visibilidad resulta patente esta mañana en el entorno del Fiouco (A Pastoriza), en donde la transcantábrica toca techo al rozar los 700 metros de altitud, pero ha ido disminuyendo a medida que avanzaba el día.
Mientras tanto, la circulación entre Arroxo y A Xesta discurre, como ocurre en estos casos de cierre de la autovía, por la vieja N-634.