La retirada de sanciones, irrenunciable

Dolores Cela Castro
dolores cela LUGO / LA VOZ

LUGO

carlos castro

Los negociadores tienen el reto de salvar 35 días de obstáculos

16 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Urbaser y el comité de empresa han vuelto a la mesa de negociaciones . A lo largo de la tarde de ayer hubo varios contactos, de cara a conseguir una aproximación para la firma del convenio colectivo, que fue lo que motivó la convocatoria de huelga. Las partes ya expusieron sus posturas, ahora sin mediador. En la primera reunión estuvo el concejal de Medio Ambiente, Luis Álvarez. La empresa reclama el cumplimiento de los servicios mínimos y el comité, la retirada de las sanciones.

¿Son irrenunciables la retirada de despidos y de sanciones?

El comité de empresa, a través de su secretario, Julio Pacios, lo dejó claro ayer a la salida de los juzgados. «Non imos admitir rebaixas. Teñen que desaparecer as sancións e os despidos», dijo. Son 11 despidos y 72 expedientes disciplinarios. Urbaser en una primera aproximación con los representantes de los trabajadores propuso una rebaja.

Los servicios mínimos

En este punto las partes hablan idiomas diferentes, pero es una cuestión estratégica. La condición que puso la empresa para sentarse fue que la plantilla los cumpliera. En asamblea acordaron, según fuentes sindicales, no respetar los impuestos por el Ayuntamiento de Lugo, que no reconocen y que están recurridos, sino los que denominan esenciales. La realidad es que en la primera noche ampliaron la recogida en la ciudad. Urbaser mantiene la amenaza de volver a sacar a la calle a las tropas de personal foráneo. Ayer por la noche estaba prevista una asamblea en la que iban a informar de los acontecimientos del día y, casi con seguridad, de ampliar la recogida porque de ello dependía avanzar en la negociación.

El convenio colectivo

Después de 35 días de huelga, el comité sigue defendiendo que no aceptará recortes salariales ni sociales. La situación ahora es distinta al momento en el que plantearon una huelga indefinida, en la que han mantenido el tipo. A Lugo estaba previsto que se desplazará un alto directivo de la filial de ACS para encarar esta nueva etapa, sin mediador del Consello Galego de Relacións Laborais. Es de esperar que que el acuerdo que ponga fin a la huelga llegue antes del 6 de agosto, que es para cuando está fijado el segundo juicio laboral.

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