El acusado de abusar de su ahijada dice que le creó gran dependencia

Xosé Carreira LUGO / LA VOZ

LUGO

El acusado ayer en el banquillo de la Audiencia durante la celebración del juicio.
El acusado ayer en el banquillo de la Audiencia durante la celebración del juicio. alberto lópez< / span>

«Era importante para mí porque tenía una vida vacía», declaró

20 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El hombre juzgado ayer en la Audiencia Provincial acusado de abusar de su ahijada menor y de tener pornografía infantil en su ordenador, explicó al tribunal que la niña, que cuando ocurrieron los hechos, tenía 7 años, le provocó «una gran dependencia» porque por entonces, a finales de 2011, tenía «una vida vacía». El imputado afronta una petición de 13 años por parte del fiscal y de 27, por la acusación particular. Los hechos sucedieron en Monforte.

El acusado apadrinó a la pequeña porque tenía una buena relación con sus padres. Con el transcurrir del tiempo paseaba con ella, la llevaba a su casa e incluso se duchaban juntos cuando iban a la piscina, según dijo. El fiscal asegura que cuando la pequeña fue a su casa le hizo fotos desnuda, la obligó a dormir con él en la misma cama, la abrazó y le realizó tocamientos en la zona genital y, en ocasiones, le echó crema por todo el cuerpo, incluidos los genitales. Le pedía, dice la acusación pública, besos con lengua y le ofreció 7 euros por uno. Le hablaba de sexo y también le solicitó que fuera su novia.

Reconoció en la declaración que bañó a la menor, pero en la casa de sus padres y que le daba besos en la boca lo mismo que hacían sus padres. «Darse un pico era una costumbre familiar que no nos parecía mal», advirtió al tribunal.

También explicó que le sacó muchas fotos, alguna de ellas desnuda, «pero las eliminé», aseveró. De hecho, los investigadores hallaron muchos archivos miniatura que genera el ordenador.

El acusado contestó solo unas cuantas preguntas de la fiscal del caso. Sin embargo a mitad del interrogatorio dejó de hacerlo, aparentemente contrariado con la posición de presión mantenida por la representante del ministerio público. Tampoco aceptó preguntas de la acusación particular.

Antes de dejar de contestar explicó que, en una ocasión, echó crema a la menor por diversas partes del cuerpo porque «tenía la piel seca y así se lo dije a sus padres».

En su momento, en la declaración efectuada en el juzgado, dijo que quería a la niña, pero no como su padre y su madre. «Tengo una relación de dependencia. En ese momento tenía una vida vacía. Intenté apoyarme en su padre y pasó de mí. Salía a pasear con la niña y se creó una relación de dependencia. Era importante para mí», dijo el acusado en el juzgado, de acuerdo con lo que leyeron en la sala.

La fiscala le preguntó por qué razón durmió con la pequeña cuando esta fue a su casa algún fin de semana, sobre todo teniendo una cama para ella. «Se quedó varias días. El primero durmió en su cama. Al día siguiente invité a una prima de 14 años y durmieron las dos juntas. Al otro, me pidió si podía dormir conmigo y no me pareció inadecuado».

Aclaró que tuvo conversaciones de carácter sexual con ella, pero después de preguntarle a los padres qué era lo que sabía al respecto la menor. «Le expliqué que los niños venían de la barriga de su mamá. Su respuesta fue: ya lo sabía. Me gustaba tener cualquier tipo de conversación con ella, incluida la de carácter sexual».

El padre de la niña explicó que descubrió la situación por casualidad. Fue porque la relación con el acusado comenzaba a traer problemas, «porque era casi como una obligación contactar con él para todo lo relacionado con la niña; mi mujer se enfadaba». Descubrió la situación porque un día acudió agobiado a casa de su hermano y este descubrió las fotos.

«Fue ella la que me pidió dormir en mi cama y no me pareció inadecuado»